El clima organizacional es un componente, presente en cualquier entorno laboral, que influye en gran medida en la salud mental de los colaboradores. Así, un clima organizacional positivo puede promover la satisfacción laboral, el compromiso y la salud mental, mientras que un entorno laboral negativo puede tener efectos perjudiciales. Además, las emociones desempeñan un papel fundamental en este escenario, ya que impactan directamente en la percepción del tal clima y, a su vez, son influenciadas por él. Entonces… ¿Cuál es la verdadera conexión entre el clima organizacional, las emociones y la salud mental de los trabajadores?

Pero primero… ¿Qué es el clima organizacional?

En el ámbito organizacional, el clima crea un contexto que enmarca la cultura de una organización, dos aspectos interconectados de vital importancia. El clima organizacional constituye una fuente esencial para que la cultura empresarial florezca. Asimismo, influye en aspectos como las creencias, comportamientos y valores compartidos entre los miembros de la comunidad laboral.

clima organizacional y salud mental

Dentro de las organizaciones, este clima engloba diversos componentes que van más allá de la estructura física y la disposición de los espacios. Adicionalmente, abarca el ambiente social que se vive en la organización, incluyendo el tipo de relaciones entre los empleados. También, la calidad de la comunicación y los resultados alcanzados en el entorno laboral (Herrera et al., 2017).

La percepción de los colaboradores

El clima organizacional es moldeado por una serie de factores y estructuras dentro del sistema organizacional. Sin embargo, el clima resultante depende en gran medida de la percepción que los miembros de la organización tienen de dichos factores.

Esta percepción influye en la conducta de los individuos, lo que, a su vez, impacta en la actividad de la organización. En consecuencia, el clima organizacional afecta el sentido de pertenencia de los empleados, la calidad de los servicios que prestan, eficacia, eficiencia y efectividad de la organización. En adición, tiene efectos en su impacto social y desempeño general.

Con esto, un ambiente laboral saludable se relaciona con el nivel de autoridad, la estructura y la complejidad de la empresa. Se define, así, como “el conjunto de características que describen una organización y que la distinguen de otras, influyendo directamente en el comportamiento de los trabajadores”. Por lo tanto, el clima organizacional es una construcción subjetiva que se manifiesta en un grupo de trabajo, donde las personas comparten una misma percepción (Olivera-Garay et al., 2021).

¿Cómo se relaciona el clima con el bienestar humano?

En el contexto laboral, el clima organizacional se revela como un factor crítico que influye directamente en la salud y el bienestar. Para ello, la calidad de las relaciones laborales, el nivel de estrés, el acceso a recursos materiales y la sensación de seguridad personal aumentan el bienestar en el entorno organizacional.

Cuando el clima organizacional es positivo

Cuando el clima en una organización es positivo, con una comunicación fluida, relaciones sociales saludables y un ambiente que favorece el desarrollo personal, el bienestar humano aumenta. Los empleados se sienten valorados, seguros y motivados, lo que se traduce en una mayor satisfacción laboral y compromiso con la organización.

clima organizacional

¿Y cuando no lo es?

Sin embargo, un clima organizacional negativo puede tener efectos devastadores en la salud mental y física de los trabajadores. El estrés crónico, la falta de apoyo social y la inseguridad laboral pueden afectar el bienestar de las personas, contribuyendo a problemas como la ansiedad y la depresión.

En definitiva, el bienestar humano y el clima organizacional están intrínsecamente conectados. Un clima positivo fomenta el bienestar, mientras que un clima negativo genera el efecto contrario. Las organizaciones tienen la responsabilidad de crear entornos laborales que promuevan el bienestar de sus empleados.

Por ejemplo, reconociendo que la salud y el cuidado físico y mental de las personas son activos invaluables. Pues, como estamos constatando, el bienestar humano y el clima organizacional no son entidades separadas, y su interacción determina en gran medida la calidad de vida en el trabajo (Herrera et al., 2017). En este sentido, la Psicología Organizacional Positiva basada en la psicología positiva de Martin Seligman, resulta clave. Este paradigma se enfoca en potenciar fortalezas individuales, relaciones saludables y liderazgo positivo en lugar de corregir problemas.

Sobrecarga laboral y salud mental

La relación entre el bienestar y la calidad de vida laboral es fundamental en el desarrollo humano integral en las organizaciones. La satisfacción laboral, se relaciona con aspectos específicos del trabajo, prácticas de alto rendimiento y factores del entorno laboral. Además, conceptos como sobrecarga laboral, síndrome de burnout y engagement son esenciales para comprender el bienestar laboral.

La sobrecarga laboral involucra altos niveles de estrés debido al exceso de trabajo. Lo que puede tener un impacto significativo en la salud física y mental de los trabajadores. Investigaciones destacan que esta se asocia con la percepción de falta de tiempo para completar tareas y la conciencia de posibles problemas en la práctica profesional. Factores son cruciales para abordar y promover un entorno laboral saludable y satisfactorio (Ancarani et al., 2018).

Emociones: Un aspecto fundamental

El ambiente laboral y el clima organizacional están estrechamente relacionados con las emociones y el desempeño de los empleados. Así pues, el comportamiento emocional de los trabajadores, como su estado de ánimo, actitud y respuesta ante diversas situaciones, desempeña un papel vital en la productividad y el bienestar en el trabajo.

clima organizacional

Además, el desempeño laboral, que refleja la competencia de un individuo en su trabajo, se manifiesta en un ambiente laboral específico, donde factores emocionales juegan un rol crucial. El clima organizacional se origina en el estado emocional de los empleados y cómo estos interactúan con diversos aspectos de la organización.

Algunos ejemplos

Entre ellos, la comunicación, el liderazgo, la motivación y relaciones interpersonales. Adicionalmente, la cultura, el compromiso, la innovación y satisfacción son elementos que contribuyen a crear un ambiente laboral agradable o desagradable. Pues, en última instancia, influyen en el rendimiento y la calidad de vida de los trabajadores (Herrera et al., 2017).

La importancia de un buen desempeño laboral

Aumento con el clima organizacional positivo

El desempeño laboral se refiere a la capacidad de una persona para llevar a cabo sus tareas de manera efectiva, maximizando la producción y calidad en un menor tiempo y con un esfuerzo reducido. Esto involucra el cumplimiento de metas, planes y liderazgo, respaldado por conocimientos, habilidades y destrezas. Se evalúa a través de varios indicadores, incluyendo el desempeño de tareas. El mismo, mide la contribución al beneficio de la empresa; el desempeño contextual, que implica la persistencia, voluntad y cooperación; y la productividad individual, relacionada con el cumplimiento de reglas, procedimientos y objetivos organizacionales.

Con lo anterior, este aspecto contribuye a aumentar el rendimiento, facilita la retroalimentación y permite el respeto de reglas de compensación. A su vez, guía la evaluación para selección, ascenso, traslado o despido, y fomenta la formación y desarrollo de los trabajadores para mejorar la eficacia laboral.

Además, influye en la planificación y mejora de la carrera profesional, impacta en las decisiones relacionadas con las capacidades profesionales y tiene efectos en los recursos humanos. En consecuencia, revela la importancia de comprender las actividades realizadas y orientar al personal en situaciones exigentes externas (Olivera-Garay et al., 2021).

Conclusión

El clima organizacional actúa como el elemento vital que puede forjar o debilitar el bienestar humano. En relación a ello, un aspecto pasado por alto es el papel crucial de las emociones en este proceso. Y es que, la forma en que las organizaciones gestionan y nutren las emociones de sus empleados es la clave para desbloquear su máximo potencial. Por ello, la creación de un clima donde las emociones se valoran, se gestionan con empatía y se nutren para florecer es el siguiente paso hacia un entorno laboral que no solo prospera, sino que también cuida del bienestar de sus integrantes.

Referencias bibliográficas

  • Ancarani, A., Di Mauro, C. y Giammanco, M. D. (2018). Linking organizational climate to work engagement: A study in the healthcare sector. International Journal of Public Administration, 42(7), 547-557. https://doi.org/10.1080/01900692.2018.1491595
  • Herrera, Y. C., Betancur, J. D. M., Jiménez, N. L. S. y Martínez, A. M. (2017). Bienestar laboral y salud mental en las organizaciones. Revista Electrónica Psyconex, 9(14), 1-13. https://aprendeenlinea.udea.edu.co/revistas/index.php/Psyconex/article/view/328547/20785360
  • Khoshakhlagh, A. H., Sulaie, S. A., Yazdanirad, S. y Park, J. (2023). Examining the effect of safety climate on accident Risk through Job Stress: A Path Analysis. BMC Psychology, 11(1). https://doi.org/10.1186/s40359-023-01133-2
  • Olivera-Garay, Y. J., Leyva-Cubillas, L. L. y Napán-Yactayo, A. C. (2021). Organizational climate and its influence on the work performance of workers. Revista científica de la UCSA, 8(2), 3-12. https://doi.org/10.18004/ucsa/2409-8752/2021.008.02.003