La joven cantante de 25 años habla con franqueza sobre el trastorno dismórfico corporal que sufre. Demi Lovato ha hablado abiertamente en su documental sobre los trastornos alimentarios, concretamente de episodios de bulimia, revelando que sufre recaídas. La comida sigue siendo el mayor desafío en mi vida y no quiero darle el poder suficiente para decir que controla cada uno de mis pensamientos, pero es algo en lo que pienso constantemente, aseguró.

Una lucha con la báscula y la alimentación

Son muchas las personas que viven en una lucha constante con la báscula. En algunas ocasiones, esto se convierte en una disputa contra el propio metabolismo que puede derivar en trastornos alimentarios y enfermedades como la obesidad, bulimia o anorexia, entre otras. Los famosos, en muchas ocasiones y como consecuencia de estar constantemente bajo la mirada y observación del público, padecen de estos trastornos y se expresan con total normalidad para visibilizar algo que es real y ha de asumirse que está ahí para saber ayudar a quien lo pueda necesitar.

La historia de Demi Lovato

A partir de los desequilibrios alimentarios y trastornos con su imagen, desgraciadamente, las adicciones han estado muy presentes en la vida de Demi. Esto ha hecho que la artista hablase abiertamente del tema. De hecho, de ello trata su último documental Demi Lovato: Dancing with the Devil (2021). 

Demi Lovato habla sobre los trastornos alimentarios
Camino, A. (2017). La carrera de Demi Lovato está fuertemente marcada por sus vivencias personales. [Fotografía]. Recuperado de www.trendencias.com

Un documental personal

En este proyecto, la cantante cuenta en primera persona cómo ha sido superar esos momentos tan complicados de su vida. Así, Demi Lovato relata su recuperación de los trastornos alimentarios al igual que su dependencia a la droga, a raíz de la que sufrió una sobredosis en 2018.

También narra cómo ha tenido que enfrentar desde entonces contra la bulimia nerviosa, de la que fue diagnosticada el mismo año que entró en el centro de rehabilitación. Además de tener que hacer frente a comentarios de odio en redes sociales sobre su físico y vida personal.

Con lo anterior, Lovato se abre cada vez más para hablar sobre sus problemas. De hecho, una de sus publicaciones en Instagram habla sobre bulimia. En el post aparece una taza en la que se puede leer I am worth it (Yo lo valgo), con un símbolo que representa la Asociación Nacional de Trastornos de Alimentación en Estados Unidos (National Eating Disorders Association, NEDA, en inglés).

En el pie de foto, la cantante escribía: Todavía lucho. Diariamente. Hay momentos que me olvido de mis problemas con la comida y otros que es lo único que pienso. Todavía tengo la esperanza de que algún día no volveré a pensar en ello.

Disney y un mundo no tan perfecto

Reilly, K. (2021). La batalla de Demi Lovato con los trastornos alimentarios se hizo pública en 2010, cuando buscó tratamiento para la bulimia y los problemas de autolesión. [Fotografía]. Recuperado de www.lavanguardia.com

Hace poco, ofreció una entrevista a Bustle donde fue muy clara y culpó a Disney de los desordenes alimenticios que padeció. Solía tener gente vigilándome la noche antes de una sesión de fotos para asegurase de que no comía nada, para que así al día siguiente no estuviera hinchada.

La cantante recuerda que en el día de su cumpleaños, en vez de recibir una tarta le dieron sandía con crema batida sin grasa. Así, cuando salió de rehabilitación, se dio cuenta de la presión que había sufrido y de cómo su entorno laboral había normalizado esas práctica abusivas hacia ella.

Miré a mi alrededor y tuve un momento en el que pensé, ‘Guau. Esto está tan terriblemente normalizado’, comenta.

La popularidad: No todo es color de rosa

Demi Lovato es una de las artista más populares del panorama pop internacional, pero eso no asugura una vida color de rosa. Sufrió una sobredosis que la hizo estar al borde de la muerte. La prensa y ella misma han hecho público los incesantes problemas de salud que ha sufrido desde su infancia: trastornos alimentarios, ansiedad y depresión. Pero a dos años de cumplir la treintena, Demi ha anunciado, al fin, la superación.

El resurgir de Demi Lovato

Acudió a Good Morning America para hablar sobre su regreso a la música y, sobre todo, de su salud mental. No estoy necesariamente avergonzada con lo sucedido, comenzaba, haciendo alusión a la sobredosis que sufrió en 2018 que la ingresó a terapia intensiva.

Agencias. (2020). La artista dijo que una de las cosas más complejas de sobrellevar dicha situación son los comentarios de ciertas personas a tu alrededor diciéndole cómo debería verse. [Fotografía]. Recuperado de www.elimparcial.com

Tal vez lo esté porque he pasado por algunas cosas o tomado algunas decisiones equivocadas. Y creo que eso es natural en cualquier persona que haya cometido errores en sus enfermedades mentales. Pero también sé que parte de deshacerse del estigma es difundir la conciencia y hablar sobre ello, comentó.

Y otros que se suman

Falta de autoestima, bullying, ansiedad, estrés o problemas personales son solo algunas de las razones por las cuales se pueden desarrollar trastornos alimentarios, como la anorexia, bulimia o vigorexia. Asimismo, es bien sabido que estos desórdenes pueden afectar tanto a mujeres como a hombres.

Así, artistas como Taylor Swift y Zayn Malik han contado también su historia y están alzando la voz sobre un tema tan delicado del que se habla muy poco, a pesar de que miles de personas en el mundo lo sufren. Además, grandes cantantes como Lady Gaga han batallado durante años con la bulimia, o la cantante y actriz Hilary Duff, quien sufrió un cuadro de anorexia nerviosa que comenzó por la presión externa y las críticas a su cuerpo. Otras, como Christina Aguilera, han dado un paso muy importante al aceptar que en el mundo, no todos tenemos que pesar lo mismo porque se supone que eso es belleza.

Comunidades que invitan a romper la espiral del silencio

Como nunca antes, gracias a las redes sociales, generaciones enteras han tenido acceso a información y apoyo para comprender y superar sus trastornos alimenticios, dismorfia corporal y traumas ligados a la imagen corporal. Todo ello, gracias a movimientos como el body positivity o body neutrality, y a una comunidad dispuesta a compartir sus experiencias y romper la espiral de silencio en torno a estas enfermedades.