El fisicoculturismo, como disciplina, ha ido en aumento en los últimos años. Su alta demanda ligada al estereotipo de cuerpo ideal conlleva una alta dedicación para lograr los objetivos a nivel de competición. Aunque la información sobre el fisicoculturismo se ha populariza por las redes, suele ser errónea, perjudicando la salud de los deportistas que lo practican. Veamos más sobre el culturismo y algunas patologías que pueden presentarse.
¿Qué es el culturismo?
El culturismo es un deporte a través del cual se busca entrenar la funcionalidad del músculo. En este, existen distintas categorías de competición, tales como el culturismo clásico, body fitness, fisicoculturismo y bikini fitness o men’s physique.
La alimentación en el deporte: Un pilar fundamental de resultados
Para la realización de dicho deporte se necesita del consumo de una dieta equilibrada con un aporte extra de proteínas. Y es que, este aporte de proteínas resulta imprescindible para el restablecimiento muscular post-entrenamiento, ya que contribuye significativamente a la reparación y fortalecimiento de los tejidos musculares después del ejercicio.
De hecho, está comprobado que un 93,75 % de los fisicoculturistas ingiere entre 4 y 7 comidas al día para llegar a los estándares necesarios a nivel físico. Asimismo, en otros estudios se ha comprobado que el 100 % ingieren suplementos como complemento de la dieta.
Culturismo y riesgos para la salud
La desinformación sobre qué consumir, y de qué manera hacerlo, afecta negativamente en la salud de deportistas que no son monitorizados por personal capacitado. De este modo, la restricción de calorías, los períodos de ayuno, el consumo elevado de proteína, las modificaciones en la hidratación y las ayudas ergogénicas, tanto legales como ilegales, llevan a efectos perjudiciales.
Efectos perjudiciales del fisicoculturismo
- Afectación de la función cognitiva
- Alteraciones dietéticas
- Estreñimiento
- Variación en el metabolismo
- Descalcificación ósea
- Transformación hormonal
- Depresión
- Aumento de la temperatura corporal
- Riesgo de enfermedades cardiovasculares (Berdugo et al., 2023).
La vigorexia: ¿Una patología asociada al culturismo?
Es un trastorno de tipo dismórfico muscular, vinculado con la imagen del cuerpo perfecto que rige en la actualidad, bajo la versión de un cuerpo con una estructura musculosa, definida y desarrollada. Pues, se encuentra ligada al aumento del volumen de los músculos del cuerpo.
Para ello, los deportistas del dedican muchas horas de entrenamiento y esfuerzo, con miras a lograr su estructura idílica pero sin llegar al extremo de la deformidad corporal. Algunos estudios han revelado que se presenta mayoritariamente en hombres, entre los 18-35 años, con factores predisponentes.
¿Qué pasa con la imagen corporal?
En el caso de la vigorexia cabe destacar que la misma afecta en dos niveles, en el nivel cognitivo-afectivo y perceptivo. Con respecto al nivel cognitivo-afectivo, aparecen insatisfacciones vinculadas con los ideales preestablecidos, bajo estándares muy poco realistas y extremos.
Mientras que, en el nivel perceptivo, se distorsiona la imagen del cuerpo humano en tamaño, forma y peso. Por lo que, a consecuencia de ello, los entrenados suelen aumentar los ejercicios realizados y las acciones para conseguir su mejor versión muscular. Incluso bajo el consumo de anabólicos o suplementos que puedan perjudicar su salud.
¿A qué tipo de personas afecta?
Los deportistas afectados suelen ser personas con rasgos de trastornos obsesivos predisponentes, quienes llevan una rutina muy restrictiva en cuanto a alimentación, hábitos saludables y actividades, al punto de que nada interfiere con su rutina preestablecida. Un riesgo con el que convivir es la posible adicción a sustancias anabólicas con consecuencias en el incremento de la masa muscular de manera acelerada, así como un desgaste progresivo en las articulaciones debido al incremento de peso para aumentar la misma (Terán-Espinosa y Alcivar-Paredes, 2020).
¿Qué son los anabólicos-androgénicos?
Son sustancias farmacológicas sintéticas derivados de la testosterona, que es la hormona sexual masculina producida por el cuerpo. Pueden administrarse vía oral, por inyección intramuscular o subcutánea, por implantación subcutánea de gránulos o por aplicación sobre la piel (Torrisi et al., 2020).
Estas sustancias promueven tanto el crecimiento del músculo esquelético como el desarrollo de características sexuales masculinas. Por esta razón, los fisicoculturistas fueron los primeros en utilizarlas, seguidos por los levantadores de pesas y atletas de otras disciplinas persiguiendo tanto fines estéticos como de rendimiento.
Uso prolongado de sustancias y su efecto
En contraposición, uno de los mayores problemas que se vienen presentando en los últimos años es el consumo de estas sustancias en toda la población, aunque específicamente en usuarios de gimnasios, generando un síndrome de dependencia a las sustancias como producto de su uso prolongado. Por lo tanto, son sustancias que comprometen la salud de quien las consume de manera inadecuada, llegando a provocar consecuencias decisivas (Fragoso Salvatierra et al., 2021).
Las que salen perdiendo: Funciones cognoscitivas y ejecutivas
Al respecto, puede afirmarse que las repercusiones son negativas para el cerebro y la cognición, en tanto que disminuyen las capacidades cognitivas. Tal es así, que algunas investigaciones han demostrado que frente a un consumo prolongado o dependiente, existe afectación de la memoria viso-espacial, de reconocimiento de patrones, retrospectiva-prospectiva y de la atención.
Asimismo, las variaciones presentadas a nivel cognoscitivo podrían presentarse como un factor de riesgo para padecer algún tipo de demencia a futuro. Además, también pueden verse afectadas las funciones ejecutivas, referidas concretamente a la planeación, inhibición, velocidad de procesamiento, memoria de trabajo, resolución de problemas y flexibilidad mental (Fragoso Salvatierra et al., 2021).
Las arritmias también se suman
El sistema cardiovascular es uno de los sistemas que se ve más afectado por los efectos secundarios del consumo de tales sustancias, dado que, la remodelación cardíaca fisiológica de los atletas se modifica a una hipertrofia cardíaca fisiopatológica con un mayor riesgo de arritmias que pueden conducir a la muerte de los fisicoculturistas.
Si bien su consumo mejora la resistencia vascular y la presión arterial, el perfil de biomarcadores proinflamatorios y el tono simpático altera las lipoproteínas séricas y produce toxicidad miocárdica directa. Con esto, no pueden desconocerse los eventos cardiovasculares adversos como el deterioro de la función ventricular izquierda, trombosis arterial, embolia pulmonar e hipertrofia ventricular izquierda, asociados con miocitólisis y fibrosis (Torrisi et al., 2020).
Conclusión
El fisicoculturismo, como deporte de competición, requiere de cierta preparación, para lo cual, el entrenamiento y la disciplina es fundamental. Este debe ser acompañado por un entrenador capacitado para ello, por lo que las etapas de volumen y definición muscular requieren de un control más estricto.
Así, la dedicación constante es clave para alcanzar los objetivos deseados. Sin embargo, lo cierto es que, a pesar de los riesgos que puedan presentarse a nivel deportivo en el culturismo, el asesoramiento de un profesional acompañado de un buen descanso y trabajo psicológico, ayudará a obtener buenos resultados en términos de rendimiento.
Referencias bibliográficas
- Berdugo, B., Gallego, S., Mejía, E. y Rincón, E. (2023). Conocimientos, prácticas alimentarias e ingesta nutricional en deportistas de fisicoculturismo. Nutrición Clínica Y Dietética Hospitalaria, 43(2), 123-130. https://doi.org/10.12873/432berdugo
- Fragoso Salvatierra, Y. I., Camacho Ruiz, E. J., Ibarra Espinosa, M. L. y Orozco Vargas, A. E. (2021). Funcionamiento Cognoscitivo en Usuarios de Esteroides Anabólico-Androgénicos: Revisión Sistemática. Revista Mexicana de Trastornos Alimentarios, 11(2), 221-231. https://doi.org/10.22201/fesi.20071523e.2021.2.722
- Terán-Espinosa, J. D. y Alcivar-Paredes, O. G. (2020). Vigorexia en fisicoculturistas del gimnasio Evolve de Portoviejo. Revista científica Dominio de las Ciencias, 6(4), 618-631. http://dx.doi.org/10.23857/dc.v6i4.1481
- Torrisi, M., Pennisi, G., Russo, I., Amico, F., Esposito, M., Liberto, A., Cocimano, G., Salerno, M., Li Rosi, G., Di Nunno, N. y Montana, A. (2020). Sudden Cardiac Death in Anabolic-Androgenic Steroid Users: A Literature Review. Medicina (Kaunas), 56(11), 1-19. https://doi.org/10.3390/medicina56110587