Muchas veces asociamos conceptos como el de terapia desde un enfoque de rehabilitación y/o restauración de un déficit. Sin embargo, si bien dicho aspecto está presente, no lo es todo. En ese sentido, un campo que emerge dentro de la salud es la terapia ocupacional. Bajo sus principios, busca el bienestar general de la persona, promoviendo la adquisición de una autonomía progresiva en la realización de actividades. En esta nota, veremos de qué trata la terapia ocupacional, en qué contexto surgió y cuáles son sus beneficios.
¿Qué es la terapia ocupacional?
La terapia ocupacional es una profesión que se enfoca en mejorar el bienestar de personas de todas las edades, al facilitar ocupaciones que promueven la salud y participación en la sociedad. Para lograrlo, los profesionales respaldan la participación de los consultantes en ocupaciones y actividades que desean, necesitan y eligen llevar a cabo en su vida cotidiana. Además, exploran nuevas formas de hacer las cosas al adaptar actividades y entornos físicos y sociales para mejorar la función, capacidad y participación.
Trabajando en estrecha colaboración con aquellos que forman parte de la vida del individuo, como familiares, cuidadores, docentes y empleadores, los terapeutas ocupacionales buscan alcanzar los resultados deseados tanto de las personas como de las comunidades. En consiguiente, contribuyen a promover una sociedad inclusiva donde todos puedan participar activamente (Hammond, 2004)
Ámbitos de trabajo
Desde la infancia hasta la vejez, el terapeuta ocupacional despliega su conocimiento y habilidades para evaluar las necesidades individuales. Luego, diseñan planes de tratamiento personalizados y ofrecen intervenciones que permiten a las personas desarrollar las habilidades esenciales para llevar a cabo actividades cotidianas con independencia y significado.
A su vez, trabajar en diversos entornos, como hospitales, escuelas, hogares de cuidado a largo plazo y la comunidad, permite que los terapeutas ocupacionales hagan un impacto positivo y duradero en la sociedad.
¿Quiénes se benefician?
Un público que se beneficia de la terapia ocupacional, es aquel con condiciones musculoesqueléticas, como la artritis reumatoide (AR) y la osteoartritis (OA). Al respecto, una encuesta reveló que aproximadamente el 43% de los mayores de 65 años experimentan dificultades con las actividades domésticas. Mientras que, el 33%, presenta problemas con pasatiempos y actividades de ocio debido principalmente a la artritis, especialmente la OA. De igual manera, las personas con AR a menudo enfrentan una interrupción en sus roles y actividades.
Aunque la capacidad funcional puede no disminuir significativamente en los primeros 5 años, existe una variabilidad considerable en la progresión de la enfermedad. Así, alrededor del 60% de las personas con AR experimentan dificultades funcionales desde las etapas iniciales. Pero, después de 20 años, aproximadamente el 80% experimenta discapacidades moderadas o graves.
Con lo anterior, también hay tener en cuenta que las personas con AR pueden sufrir una disminución significativa en la fuerza de agarre y la función de las manos. Lo que, en consecuencia, afecta su capacidad para trabajar y realizar actividades cotidianas.
Los primeros comienzos de la disciplina
La historia de la terapia ocupacional tiene sus raíces en el tratamiento de personas con enfermedades mentales. En 1786, el médico francés Philippe Pinel introdujo la noción de utilizar actividades manuales para ayudar a los pacientes psiquiátricos a recuperar sus intereses previos, trabajo y bienestar.
Al mismo tiempo, en Estados Unidos (EE. UU.), el médico Benjamin Rush destacó como un ferviente defensor de la utilización del trabajo, el ejercicio y los intereses en la recuperación de las personas con trastornos mentales.
A finales del siglo XIX, el psiquiatra Adolf Meyer promovió la idea de utilizar actividades gratificantes para ayudar a quienes tenían enfermedades mentales a volver a la vida normal en la sociedad. Asimismo, enfatizó la importancia de equilibrar el trabajo, el juego y el descanso. Posteriormente, los escritos de Meyer comenzaron a esbozar una filosofía formal que eventualmente se convertiría en la profesión de terapia ocupacional.
Siglo XX: Formalización de la terapia ocupacional
En 1914, el arquitecto neoyorquino George Edward Barton estableció una institución que utilizaba el trabajo como terapia para tratar una amplia variedad de enfermedades y discapacidades físicas y mentales. Convencido de los beneficios de utilizar actividades significativas en la rehabilitación, nombró a su enfoque de tratamiento “terapia ocupacional”.
La terapia ocupacional fue formalmente establecida como profesión en 1917 en la primera reunión de la Sociedad Nacional para la Promoción de la Terapia Ocupacional (National Society for the Promotion of Occupational Therapy [NSPOT]). En 1923, el nombre se cambió a Asociación Americana de Terapia Ocupacional (American Occupational Therapy Asociation [AOTA]).
Por otra parte, la necesidad de la terapia ocupacional en el tratamiento de discapacidades físicas aumentó durante la Primera Guerra Mundial, cuando los soldados heridos regresaron. A su vez, la Segunda Guerra Mundial también amplió el uso de la terapia ocupacional en la rehabilitación de lesiones físicas.
La necesidad de la terapia ocupacional en cuidados a largo plazo
La terapia ocupacional está involucrada en el contexto de los cuidados a largo plazo (long-term care, LTC, en inglés). Pues, tiene como objetivo principal mejorar la calidad de vida de los residentes promoviendo su participación en ocupaciones significativas.
En LTC, es común que los residentes experimenten una disminución de sus capacidades relacionada con la edad y la enfermedad. Como resultado, esto puede derivar en una privación ocupacional, es decir, la falta de participación en ocupaciones significativas. En añadidura, la privación ocupacional puede desencadenar depresión, por poner un ejemplo, comprometiendo el bienestar psicológico en general.
Para promover la justicia ocupacional, que implica el derecho humano de participar en ocupaciones valoradas, es esencial ayudar para compensar los cambios relacionados con la edad. En ese sentido, la participación en actividades de ocio, una forma de ocupación, mejora la motivación y las habilidades físicas y psicológicas.
Lo anterior, a su vez, tiene un impacto positivo en la calidad de vida. Por lo tanto, es necesario incluir la evaluación de la participación en actividades de ocio en la evaluación global de ocupaciones significativas.
El bienestar y calidad de vida como metas
La investigación ha demostrado una asociación entre la calidad de vida y el bienestar psicológico con las habilidades cognitivas deterioradas en residentes de LTC. Además, se ha encontrado una clara relación entre el declive cognitivo y un menor bienestar en casi todas las medidas.
Además, como se ha mencionado, dado que las tasas de depresión tienden a aumentar después de la admisión en LTC, es aún más crítico evaluar el bienestar emocional de los residentes. Pues, afecta la motivación para participar en actividades que antes eran significativas. En esa línea, la depresión puede manifestarse como falta de interés, soledad y una disminución en las capacidades cognitivas, lo que compromete aún más el bienestar (Janssen y Grabanski, 2023).
Conclusión
La terapia ocupacional, con su enfoque en actividades significativas y participación, emerge como un pilar en salud. Pero, más allá de tratar síntomas, esta disciplina capacita a las personas para una vida plena. Por lo que, la justicia ocupacional y la promoción de actividades valiosas impactan en la salud física y el bienestar psicológico. Bajo dicho criterio, este enfoque no solo mejora vidas individuales sino también reduce costos de atención médica y fortalece la sociedad.
Referencias bibliográficas
- Centro de Estudios Especializado en Lenguaje y Aprendizaje. (s. f.). The occupational therapy field. Recuperado el 15 de septiembre de 2023, de https://www.ceepal.com.uy/historiaterapia.pdf
- Hammond, A. (2004). What is the role of the occupational therapist? Best Practice & Research. Clinical Rheumatology, 18(4), 491-505. https://doi.org/10.1016/j.berh.2004.04.001
- Janssen, S. y Grabanski, J. L. (2023). Occupational Therapy In Long Term Care. StatPearls Publishing.
- Lim, Y. M., Lee, J. S., Kim, S. K., Cha, T. H., Yoo, D. H. y Kim, H. (2022). An exploratory study on the role of occupational therapists in home-based rehabilitation team in South Korea. Hong Kong journal of occupational therapy : HKJOT, 35(2), 180-189. https://doi.org/10.1177/15691861221136262