Cuando una persona experimenta un evento traumático (como un accidente grave, un desastre natural o un evento violento), el cerebro a menudo almacena ese recuerdo de manera intensa y perturbadora. Esto puede llevar a síntomas de estrés postraumático (TEPT) y trastornos relacionados. Así, se han desarrollado múltiples abordajes de tratamiento enfocados en la reparación psíquica y emocional de quienes han tenido que atravesar una situación traumática. Recientemente, se han comenzado a investigar tareas cognitivas como el Tetris en la irrupción del proceso aversivo. ¿Cómo se relacionan estas dos variables? ¿El Tetris es efectivo como herramienta terapéutica?
¿Qué son las experiencias traumáticas?
La respuesta traumática es una reacción psicológica y emocional que puede surgir como consecuencia de presenciar eventos percibidos como amenazantes para la vida o que conllevan el potencial de causar graves lesiones a uno mismo o a otros. Dichas experiencias, mayoritariamente, se caracterizan por sentimientos intensos de miedo, horror e indefensión, y son fundamentales para el diagnóstico del TEPT.
En un principio, se pensaba que el TEPT representaba una respuesta normativa cuya gravedad estaba directamente relacionada con la intensidad del trauma o el estrés sufrido. No obstante, a lo largo del tiempo, se ha vuelto evidente que la reacción de una persona no se limita únicamente a las características del estresor. Y es que, otros factores también desempeñan un papel fundamental en la respuesta traumática (Shalev et al., 2017).
Factores influyentes en el trauma
La respuesta traumática a eventos estresantes puede estar influenciada por una serie de factores protectores y factores de riesgo que determinan cómo una persona procesa y se recupera de una experiencia traumática. Los factores protectores son aquellos elementos que ayudan a mitigar los efectos negativos del trauma y promueven la resiliencia psicológica. Estos pueden incluir un sólido sistema de apoyo social, relaciones familiares estables, una autoestima saludable y estrategias efectivas de afrontamiento.
Por otro lado, los factores de riesgo aumentan la probabilidad de que una persona desarrolle una respuesta traumática más intensa o TEPT. Allí, encontramos elementos que pueden comprender una exposición prolongada o repetida al trauma, la falta de apoyo social, antecedentes de trastornos psicológicos preexistentes, como la ansiedad o la depresión. Si te interesa aprender más sobre el abordaje de la depresión, te invitamos a nuestro curso en terapia de activación conductual.
¿Y lo constitutivo?
Además, aspectos de orden neurobiológico pueden jugar un papel relevante. De esta forma, se ha observado que la activación de áreas cerebrales relacionadas con el estrés, como el sistema límbico, y las alteraciones en la regulación de neurotransmisores como el cortisol y la serotonina, pueden influir significativamente en la manifestación y la gravedad del TEPT en un sujeto (Shalev et al., 2017).
El Tetris como una vía de procesamiento del trauma
Recientes investigaciones han proporcionado evidencia sobre la utilidad del videojuego visoespacial Tetris como una intervención terapéutica temprana frente a experiencias disruptivas. En este sentido, múltiples estudios han revelado que jugar justo después de la exposición a un trauma puede disminuir significativamente la frecuencia y la intensidad de las posteriores memorias intrusivas relacionadas con el evento. Lo anterior resulta crucial, ya que la presencia de flashbacks de memoria constituyen uno de los síntomas clave en la vivencia traumática.
Ahora, se presenta una limitante central que es la inconveniencia de investigar dichos efectos en personas que aún se encuentran muy afectadas. Así, hasta el momento, el uso del Tetris como intervención se ha centrado principalmente en intentar interrumpir la consolidación de la memoria traumática en las primeras 6 horas después de la exposición al trauma, o en la reconsolidación de la memoria al día siguiente en personas bajo efectos de traumas no tan intensos (Butler et al., 2020).
¿Cuál es la hipótesis detrás de esta herramienta novedosa?
Después de la exposición a un evento, la huella de memoria de ese acontecimiento debe someterse a un proceso de consolidación en la memoria a largo plazo para que pueda ser recuperada en futuros recuerdos. En las etapas iniciales, la misma se encuentra en un estado lábil, lo que la hace susceptible a la interferencia.
Por lo tanto, realizar una tarea no relacionada mientras la memoria de un evento está en este estado lábil puede disminuir significativamente la capacidad de recuperación posterior de ese recuerdo. Además, se ha propuesto que después de la reactivación de una memoria, la misma vuelve a entrar en un estado lábil y debe volver a consolidarse en la memoria a largo plazo.
Durante este proceso de reconsolidación, la huella de memoria también se vuelve vulnerable a la interferencia. Así, se ha planteado la idea de llevar a cabo una tarea visoespacial exigente durante la consolidación o reconsolidación de la memoria. Y, como consecuencia, se pretende debilitarla debido a la competencia por los recursos cognitivos necesarios para el proceso de consolidación (Butler et al., 2020).
¿Qué tiene de especial el Tetris?
El Tetris ha demostrado tener un impacto significativo en la actividad cerebral. Se ha revelado que activa una red cerebral amplia, que involucra regiones críticas para el procesamiento visuoespacial. Entre ellas destaca la corteza visual ventral y dorsal, el giro fusiforme y el giro temporal inferior. Dicha activación cerebral se potencia aún más cuando los participantes reciben instrucciones que enfatizan la rotación mental de las piezas.
Estos hallazgos ofrecen una base sólida para la hipótesis de que el Tetris puede ser una herramienta efectiva para interrumpir la visualización mental disfuncional. Y, en el contexto de la terapia del trauma, esta interrupción de la visualización mental disfuncional se vuelve especialmente relevante (Agren et al., 2021).
Tetris y memorias intrusivas: ¿Cuáles fueron los resultados?
La intervención conductual llevada adelante por Iyadurai y colaboradores (2017) constó de dos fases interrelacionadas. Primeramente, se presentó una señal recordatoria de la memoria traumática.
Después, se siguió con la participación activa en un videojuegos en el ordenador que exigían habilidades visoespaciales elevadas, específicamente el Tetris. El enfoque se basó en la hipótesis mencionada anteriormente de que la participación intensa en el Tetris competiría eficazmente con la consolidación de las memorias visuales asociadas al evento traumático.
¿Y los resultados?
Es destacable que esta innovadora intervención arrojó resultados significativos. Así, mostró una reducción sustancial del 62% en la aparición de memorias intrusivas durante la semana posterior a la intervención en comparación con un grupo de control. Los resultados se asemejan a otras investigaciones similares realizadas por diversos grupos de investigación, concordando en que esta puede ser una herramienta útil de abordaje temprano.
Conclusión
La innovación terapéutica que involucra el uso del Tetris en el tratamiento del trauma es un fascinante ejemplo de cómo los avances tecnológicos pueden transformar la atención en salud mental. Este enfoque ilustra cómo la creatividad y la adaptabilidad pueden converger para brindar soluciones terapéuticas vanguardistas, mejorando la calidad de vida de aquellos que conviven con respuestas traumáticas.
Referencias bibliográficas
- Agren, T., Hoppe, J. M., Singh, L., Holmes, E. A. y Rosén, J. (2021). The neural basis of Tetris gameplay: implicating the role of visuospatial processing. Current Psychology, 42(10), 8156-8163. https://doi.org/10.1007/s12144-021-02081-z
- Butler, O., Herr, K., Willmund, G., Gallinat, J., Kühn, S. y Zimmermann, P. (2020). Trauma, Treatment and tetris: video gaming increases hippocampal volume in male patients with combat-related posttraumatic stress disorder. Journal of Psychiatry & Neuroscience, 45(4), 279-287. https://doi.org/10.1503/jpn.190027
- Iyadurai, L., Blackwell, S. E., Meiser-Stedman, R., Watson, P., Bonsall, M. B., Geddes, J., Nobre, A. C. y Holmes, E. A. (2017). Preventing intrusive memories after trauma via a brief intervention involving Tetris computer game play in the emergency Department: a proof-of-concept randomized controlled trial. Molecular Psychiatry, 23(3), 674-682. https://doi.org/10.1038/mp.2017.23
- Shalev, A. Y., Liberzon, I. y Marmar, C. (2017). Post-Traumatic Stress Disorder. The New England Journal of Medicine, 376(25), 2459-2469. https://doi.org/10.1056/nejmra1612499