¿Qué harías si tu hijo fuera acusado de asesinato? Adolescencia (Adolescence, en inglés), la nueva producción Netflix, plantea esta inquietante pregunta, a través de una historia profundamente emocional. Con una narrativa intensa, la serie sigue el caso de Jamie Miller, un joven señalado como el responsable de la muerte de una compañera de clase. Más allá del suspenso, la serie explora los matices de la adolescencia, el impacto de las decisiones impulsivas y el dolor de una familia atrapada en el ojo de la tormenta. Pero, ¿hasta qué punto un joven es completamente consciente de sus actos? ¿Cómo influye el entorno en la mente adolescente? Contiene spoilers.
En primer lugar: ¿Qué tan real es la historia?
Aunque Adolescencia no se basa en un caso real concreto, se nutre de hechos que ocurren con preocupante frecuencia en la sociedad. La obra de ficción, creada por Stephen Graham y Jack Thorne, se inspira en casos de crímenes juveniles recientes, especialmente en el Reino Unido, donde el uso de armas blancas en adolescentes ha generado un debate social profundo. Es así, que se nos invita a comprender el trasfondo de la violencia juvenil, explorando las presiones sociales y las consecuencias de decisiones impulsivas en el marco de la adolescencia.
Ahora, ¿de qué trata Adolescencia?
La trama sigue a Jamie Miller, un adolescente de 13 años acusado de asesinar a su compañera de clase, Katie. A partir de dicho evento, aborda el proceso judicial, así como también, el impacto psicológico en su familia y la presión mediática que enfrentan. A medida que la historia avanza, el espectador se sumerge en el complejo análisis de una etapa vital marcada por la construcción de identidad, y la dificultad para medir las consecuencias de los actos.
La adolescencia: Cambios y vulnerabilidad
Antes de continuar, para asimilar el trasfondo psicológico de Adolescencia, es crucial comprender la fase de crecimiento que lleva el mismo nombre. Concretamente, se trata de un período de intenso desarrollo tanto a nivel cerebral como emocional, en el que la toma de decisiones aún está mediada por la impulsividad y una limitada capacidad para evaluar riesgos de manera racional (Ravindranath et al., 2024).
En relación con lo anterior, uno de los momentos más impactantes sucede en el primer episodio, donde se enseña la mayor evidencia incriminatoria: una filmación de Jamie, apuñalando a su compañera. Es ahí cuando el joven murmura la frase No pensé que iba a ser así, y a su vez niega haberla asesinado, reflejando una desconexión entre la intención y el impacto de sus acciones.
El entorno del adolescente: ¿Una familia segura?
A diferencia de lo que muchas veces se asume sobre los agresores adolescentes, el joven no provenía de un hogar marcado por la violencia extrema o la vulnerabilidad social. Su familia es, a simple vista, completamente común y funcional. De hecho, sus padres, Eddie y Manda, son personas trabajadoras, preocupadas por sus hijos, sin antecedentes de abuso o negligencia, mientras que su hermana mayor, Lisa, es una joven como cualquier otra.
La masculinidad en la familia Miller
Ahora, si bien no existe maltrato intrafamiliar, sí puede inferirse un modelo de crianza en el que los sentimientos no siempre tienen un espacio claro. En concreto, Jamie crece en un ambiente donde los hombres deben ser fuertes, lo que se refleja en su relación con su padre y abuelo. Las conversaciones con la psicóloga clínica asignada a su caso exploran cómo se ha formado su identidad, cómo percibe a las mujeres y qué significa ser un hombre para él.
Ambiente escolar: El peligro del ciberacoso
Otro punto crucial es la revelación sobre un constante acoso escolar. Particularmente, en Adolescencia, se destacó la hostilidad que recibía el joven Miller en sus redes sociales, incluso, por parte de Katie, la víctima del crimen. Más que simples insultos, los mensajes lo empujaban hacia comunidades misóginas en línea, que reforzaban su resentimiento.
Siguiendo esta línea, se ha demostrado que quienes son receptores de acoso, además de presentar baja autoestima y condiciones como la depresión y la ansiedad, también pueden desarrollar comportamientos violentos como respuesta a la tensión acumulada. Podemos apreciar dicho impacto en la conducta del menor, quien, se encierra en sí mismo, evita el contacto visual y acumula ira, hasta estallar en agresividad (Lee et al., 2019).
Un desenlace sin redención: El dolor de los padres
Fui una buena madre, soy una buena madre. Eres un buen padre, un gran padre. Pero nosotros lo criamos. (Manda, madre de Jamie)
En lo que refiere al final, deja un impacto desgarrador. El protagonista, sin mostrar arrepentimiento ni justificar sus actos, decide cambiar su declaración de inocente a culpable.
Así, Adolescencia no se enfoca en el juicio, sino en las secuelas del crimen en su familia: su madre, atormentada por la duda de si debieron haber controlado mejor su actividad en internet; su padre, reviviendo obsesivamente la escena del asesinato. Y por último, su hermana, negándose a huir de la ciudad, convencida de que escapar solo empeoraría la culpa.
A lo antedicho se suma la presión mediática, que contribuye a construir la imagen pública del crimen, amplificando el impacto sobre la familia y reforzando narrativas simplificadas sobre los agresores adolescentes. Sin respuestas claras ni un cierre esperanzador, se deja abierta la pregunta sobre si este desenlace pudo haberse evitado.
Un retrato necesario de la adolescencia y sus riesgos
La serie de Netflix, Adolescencia, no es solo un thriller psicológico sobre un crimen; es una exploración profunda sobre los factores que llevan a un joven a tomar una decisión extrema. Mismamente, se comprende que la impulsividad, la falta de apoyo emocional y la influencia del entorno, tienen la capacidad para determinar ciertas conductas en un adolescente. Entonces, aunque comprender los factores no exime de responsabilidad a quienes cometen actos violentos, sí es esencial para comprenderlos para prevenirlos.
La historia del joven Miller es ficticia, pero sus conflictos reflejan realidades alarmantes. ¿Cuántos Jamie existen en la realidad sin que nos demos cuenta? Más allá del juicio moral, ¿estamos prestando atención a los signos de alerta antes de que sea demasiado tarde? Si algo podemos extraer de esta historia es la marcada invitación a reflexión que extiende al espectador. A modo de finalización, para profundizar en aspectos cruciales de esta etapa vital, te recomendamos nuestro curso en adolescencia.
Referencias bibliográficas
- Barantini, P. (Director). (2025). Adolescencia [Serie de televisión] Netflix.
- Lee, J. M., Kim, J., Hong, J. S. y Marsack-Topolewski, C. N. (2021). From Bully Victimization to Aggressive Behavior: Applying the Problem Behavior Theory, Theory of Stress and Coping, and General Strain Theory to Explore Potential Pathways. Journal of interpersonal violence, 36(21-22), 10314-10337. https://doi.org/10.1177/0886260519884679
- Ravindranath, O., Perica, M. I., Parr, A. C., Ojha, A., McKeon, S. D., Montano, G., Ullendorff, N., Luna, B. y Edmiston, E. K. (2024). Adolescent neurocognitive development and decision-making abilities regarding gender-affirming care. Developmental Cognitive Neuroscience, 67, 101351. https://doi.org/10.1016/j.dcn.2024.101351
La vi con mi hijo y la verdad que me dejo pensando… Uno cree que con estar en la casa ya alcanza, pero… Hay que hablar con los chicos, escucharlos bien, porque si no, despues buscan en otro lado y a veces se meten en cosas feas. Antes no era asi, pero ahora todo es más dificil, hay que estar más atentos… No puro dar ordenes, también hay que entenderlos… Muy buen analisis…. Dice cosas que pasan de verdad… Y a veces uno no se da cuenta hasta que es tarde… Hay que estar ahi para ellos
En argentina el problema tiene otro agregado y es la perversidad y ninguna cultura de la población en general. La nula aportación del Ministerio de Educación y de los maestros, la nula preparación de los maestros, la escasa cultura del presidente actual y de la anterior.