Los seres humanos pasamos una media del 70% de nuestras horas diarias hablando y escuchando. Lo que convierte a la comunicación en una de las actividades a las que más tiempo dedicamos durante toda nuestra vida. Teniendo este dato en cuenta, es importante que nos demos el espacio, tiempo y esfuerzo necesario para aprender a comunicarnos de la mejor forma posible. De esta forma, se podrá hacer de las palabras el mejor de los recursos. Algunos autores afirman incluso que “el lenguaje puede influenciar el modo en el que se percibe la realidad” (Parks y Roberton, 1998). Pero, ¿cómo influye el lenguaje en mi vida?, ¿cuál es el mejor estilo de comunicación asertivo? ¿cómo puedo aprender a comunicarme mejor? Indaguemos en la comunicación asertiva y en por qué es importante.
¿Qué es la comunicación asertiva?
Es entendida como la habilidad para expresar nuestras propias opiniones, deseos y necesidades personales mientras tomamos en cuenta, y respetamos, esas mismas realidades de las personas que nos rodean (Rakus, 1995). De esta forma, podría decirse que la asertividad es el camino hacia “un equilibrio entre los demás, y nosotros mismos” a través de la comunicación. Una forma de ser justos con nosotros mismos y con los demás.
Utilizando la comunicación asertiva podemos trabajar la capacidad de aumentar las probabilidades de conseguir y mantener relaciones sociales más “positivas” y beneficiosas. Tanto para nuestro desarrollo como éxito personal. En comparación de lo que conseguiríamos con otras formas de comunicarnos menos funcionales (como la imposición de nuestros deseos o la sumisión del resto, por ejemplo) (Marchezini et al., 2010)
Así pues, del mismo modo que un artista no pinta todo un cuadro con el mismo pincel, si no que se vale de diversas herramientas con distintos grosores, trazos y texturas. Podemos pensar en dichas técnicas comunicativas como diferentes “herramientas” que utilizaremos cuando la situación lo requiera. Teniendo clara la importancia y el valor de un estilo de comunicación asertivo, veamos cuatro técnicas efectivas de comunicación asertiva.
¿Qué herramientas favorecen la comunicación asertiva?
Si bien existen múltiples herramientas, veremos a continuación algunas de las mejores recomendaciones asertivas que podemos empezar a implementar en nuestro día a día. Esto con el objetivo de hacer de la comunicación el vehículo perfecto de los valores, deseos y necesidades (Castanyer, 1996).
Estructurar un mensaje con un estilo de comunicación asertivo
Esta pequeña fórmula, puede ayudar a enunciar cualquier frase de una forma asertiva. Además, sirve de guía para adaptarla a cualquier situación a la que nos enfrentemos en nuestra vida diaria.
- Descripción “objetiva y sin juicio” del comportamiento de los demás.
- De cómo “nos hace sentir” ese comportamiento.
- De “nuestros sentimientos y deseos” de forma amable.
- Expresión de lo que “nos gustaría recibir de la otra persona”.
Banco de niebla
Cuando una persona aborda una conversación donde existe un conflicto, se puede mostrar acuerdo con una parte del dialogo del otro. Esto resulta importante porque, de esta forma, se le hace entender al receptor que “podemos encontrar un principio de acuerdo”.
Ruptura del proceso
En ocasiones, algunas conversaciones pueden tornarse acaloradas y efusivas. Factores que pueden desembocar en que la otra persona se altere, diga algo fuera de lo razonable o falte el respeto. Una de las mejores soluciones que se puede tomar es “romper la comunicación”, expresando de forma sincera que está habiendo una falta de formas asertivas y que eso impide seguir con la conversación.
Aplazamiento asertivo
En una situación en la cual “no sabemos” cómo responder a las demandas de la otra persona, se puede expresar con total honestidad “que es necesario valorar detenidamente la información para poder ofrecer una respuesta a la altura”. Esto, es una muestra de sinceridad y respeto por nuestro oyente, al querer ofrecerle la mejor de las respuestas. Ahora bien, como toda habilidad, un estilo de comunicación asertivo requiere de un proceso de aprendizaje previo para poder dominar la técnica. Pero, ¿cómo se puede “entrenar” esta habilidad?
Entrenar la asertividad: Algunos ejemplos
Como enuncia el filósofo Séneca: “Considera los problemas, un ejercicio”. Siguiendo este planteamiento, cuando hacemos frente a una situación complicada, podemos enfocar el contexto como una oportunidad para poner en práctica nuevas habilidades y conocimientos. En este sentido, estas son algunas de las situaciones más comunes donde se puede poner en práctica la comunicación asertiva (Rich y Schroeder, 1976):
- Cuando se expresan sentimientos o emociones “negativas”: Un ejemplo es responder a críticas o a un trato injusto que no nos ha hecho sentir bien.
- Cuando uno se enfrenta a sus propias limitaciones: Como pedir ayuda para completar una tarea, o un favor para superar cierto inconveniente.
- Cuando se toma la iniciativa: Por ejemplo presentarnos ante desconocidos, tomando parte en una conversación ya iniciada.
- Cuando se muestran sentimientos “positivos” : Al expresar una muestra de afecto, satisfacción o aprecio hacia otra persona, desconociendo cómo va a reaccionar.
Conclusión
Los seres humanos somos animales sociales, hecho que se observa desde el propio momento de nuestro nacimiento. Además, somos uno de los animales que más tiempo se demoran en aprender a caminar. Siendo la media unos 12-18 meses, según afirma la Organización Mundial de la Salud (OMS). Mientras que otros animales, como los ciervos, caminan de forma autónoma desde prácticamente el momento de su nacimiento.
Esto evidencia, que como especie “tenemos la necesidad literalmente vital” de pertenecer a un grupo, a una tribu que nos apoye, nos cuide, y guie nuestro desarrollo. Teniendo en cuenta dicha necesidad inherente a la naturaleza, se puede poner en perspectiva la importancia de la comunicación. Por supuesto, no solo en lo que decimos, sino cómo lo decimos.
Referencias bibliográficas
- Castanyer, O. (1996). La asertividad. Expresión de una sana autoestima. Desclée de Brouwer.
- O’Rourke, J. S. (2012). Management communication: A case-analysis approach: Second custom edition for Columbia college of Missouri. Pearson Learning Solutions.
- Vagos, P. y Pereira, A. (2019). Towards a cognitive-behavioral understanding of assertiveness: Effects of cognition and distress on different expressions of assertive behavior. Journal of Rational-Emotive and Cognitive-Behavior Therapy: RET, 37(2), 133-148. http://hdl.handle.net/11328/3497
- Leiria, M., Correia, I., Pinto, M., Galvão, S. y Lapa Esteves, M. (2020). A aplicabilidade da comunicação na psicologia. International Journal of Developmental and Educational Psychology Revista INFAD de psicología, 1(1), 435-442. https://revista.infad.eu/index.php/IJODAEP/article/view/1805