El Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) es una condición que afecta la vida diaria de quienes lo padecen. Aunque la terapia cognitivo-conductual (TCC) con exposición y prevención de respuesta (Exposure and Response Prevention, ERP, en inglés) es el tratamiento de primera línea, no todos los pacientes responden favorablemente. En dicho contexto, las terapias basadas en mindfulness y aceptación han surgido como una alternativa prometedora. A continuación, exploraremos cómo los tratamientos orientados a la atención plena son capaces de ofrecer una alternativa eficaz para el tratamiento del TOC.
El TOC y sus tratamientos tradicionales

El mencionado trastorno se caracteriza por la presencia de obsesiones (pensamientos intrusivos y angustiantes) y compulsiones (acciones repetitivas para reducir la ansiedad). Dicha condición no solo genera un gran malestar emocional, sino que también interfiere con la funcionalidad cotidiana, afectando el bienestar social y laboral de quienes lo padecen.
Como mencionamos anteriormente, la TCC con ERP constituye el tratamiento más eficaz para la presente afección. Sin embargo, se ha comprobado que hasta un tercio de los pacientes no obtiene mejoras significativas.
Además, la adherencia en algunos casos llega a ser baja, debido a la dificultad de enfrentar directamente las obsesiones sin recurrir a rituales compulsivos. Ante estas limitaciones, la investigación actual explora nuevas alternativas terapéuticas para abordar el TOC, entre ellas, las intervenciones basadas en la atención plena.
Mindfulness como estrategia terapéutica
De tal forma, las terapias basadas en la atención plena y aceptación incluyen distintos enfoques. Entre ellas se destacan las siguientes:
- Terapia de Aceptación y Compromiso (Acceptance and Commitment Therapy, ACT, en inglés).
- Terapia Cognitiva Basada en Mindfulness (Mindfulness-Based Cognitive Therapy, MBCT, en inglés).
- Reducción de Estrés Basada en Mindfulness (Mindfulness-Based Stress Reduction, MBSR, en inglés).
Las intervenciones nombradas permiten a los pacientes a desarrollar una actitud de observación no reactiva hacia sus pensamientos intrusivos, reduciendo la necesidad de responder con compulsiones. En efecto, según diversos estudios, las estrategias de atención plena promueven la flexibilidad psicológica y reducen la fusión cognitiva con los pensamientos obsesivos del TOC. A través de la aceptación, se aprende a tolerar la ansiedad sin intentar suprimirla. Como consecuencia, facilita una mayor adaptación emocional y una disminución en la intensidad de los síntomas.
Un estudio: Impacto del mindfulness en el TOC
Una revisión analizó 46 ensayos clínicos con un total de 2.221 participantes diagnosticados con TOC. Los estudios incluidos evaluaron la efectividad de programas basados en mindfulness en comparación con otras intervenciones, como la TCC o la medicación, y la no intervención. Además, se aplicaron medidas estandarizadas para determinar la reducción de los síntomas. Por último, se examinaron factores moderadores como la duración del tratamiento y las características de los participantes.
Resultados: ¿Qué nos dice la evidencia?

Los hallazgos obtenidos en la revisión indican que las terapias basadas en mindfulness generaron una reducción significativa en la severidad del TOC. En los ensayos controlados aleatorizados, la mejora en los síntomas fue comparable con la obtenida con la TCC y ERP. En contraste, dichas intervenciones fueron significativamente más eficaces que la medicación y que la simple espera sin tratamiento.
Reducción de síntomas a largo plazo
Siguiendo esta misma línea, se identificó que la reducción de síntomas se mantenía en el mediano plazo. En dicho sentido, se manifestaron efectos positivos registrados en seguimientos de hasta seis meses posteriores al tratamiento.
Tal dato sugiere que el mindfulness no solo es eficaz en la fase inicial de la intervención en el TOC, sino que también es capaz de generar cambios duraderos en el tiempo. Asimismo, presentaron menos efectos secundarios en comparación con quienes tomaban medicación, aspecto que se resalta como una ventaja adicional de la estrategia terapéutica.
Impacto en comorbilidades
Por otro lado, las personas que participaron en estos programas experimentaron una reducción significativa en los niveles de estrés emocional y rumiación, factores que suelen exacerbar los síntomas relacionados con el trastorno. Consecuentemente, y además de reducir los síntomas obsesivo-compulsivos, las intervenciones basadas en la atención plena mostraron efectos positivos en la disminución de la depresión y la ansiedad, dos condiciones comúnmente asociadas al TOC.
Sumado a ello, se observó que la práctica de la atención plena contribuyó a mejorar la regulación emocional, brindando la posibilidad de gestionar mejor sus episodios de ansiedad y disminuir los pensamientos catastrofistas. En último lugar, también se reportaron beneficios en la calidad del sueño, un aspecto que frecuentemente se ve alterado y que impacta negativamente en el bienestar general.
Factores moderadores

Curiosamente, la duración del tratamiento no influyó en la efectividad del mindfulness, lo que sugiere que su impacto positivo no depende del número de sesiones, sino de la práctica sostenida. Además, se encontró que la adherencia al tratamiento y la práctica autónoma de los ejercicios fueron factores clave para potenciar los beneficios de la terapia.
Tampoco se encontraron diferencias significativas según el género de los participantes o la experiencia previa de los terapeutas. Lo dicho propone que el mindfulness es una intervención versátil, aplicable a distintos perfiles clínicos. Sin embargo, algunos ensayos apuntan que aquellos pacientes con mayor flexibilidad cognitiva o disposición a aceptar sus pensamientos intrusivos pueden beneficiarse más del antedicho enfoque.
Limitaciones
A pesar de los resultados prometedores, el presente metaanálisis cuenta con algunas limitaciones. Precisamente, la heterogeneidad en los protocolos de intervención dificulta la comparación entre estudios. Por otro lado, muy pocos ensayos evaluaron los efectos a largo plazo, lo que resulta necesario para determinar la estabilidad de los beneficios en el tiempo.
Asimismo, se requiere una mejor comprensión de los mecanismos específicos mediante los cuales el mindfulness contribuye a la reducción de síntomas en el TOC. Por ello, también es necesario evaluar qué perfiles de pacientes se beneficiarían más de las intervenciones, con el fin de optimizar su aplicación clínica.
La ciencia respalda el uso de la atención plena en el TOC
Las terapias basadas en mindfulness han demostrado ser una alternativa eficaz para el tratamiento del TOC. Sus efectos son comparables a los de la TCC con ERP y superiores a los de la medicación, especialmente en la reducción de síntomas obsesivo-compulsivos y en la mejora del bienestar emocional.
Sin embargo, es necesario llevar a cabo investigaciones con seguimientos prolongados para determinar la permanencia de los beneficios asociados a lo largo del tiempo. ¿Podría el mindfulness consolidarse como una opción de primera línea en el abordaje del TOC? Si te interesa profundizar en el diagnóstico diferencial y la comorbilidad del mismo, junto con una evaluación detallada del patrón afectivo, cognitivo y conductual, te invitamos a nuestro curso sobre TOC: Evaluación y diagnóstico.
Referencia bibliográfica
- Bürkle, J. J., Schmidt, S. y Fendel, J. C. (2025). Mindfulness and acceptance-based programmes for obsessive-compulsive disorder: A systematic review and meta-analysis. Journal of Anxiety Disorders, 110, 102977. https://doi.org/10.1016/j.janxdis.2025.102977