¿Te has planteado alguna vez cómo se afrontan los trastornos del neurodesarrollo desde la neuropsicología infantil? Los niños que presentan problemas cognitivos, académicos o comportamentales suelen requerir una evaluación neuropsicológica infantil. Sin embargo, algunos menores con trastornos psiquiátricos o del neurodesarrollo más complejos van a requerir atención por parte de diferentes especialistas para valorar su estado neurológico o neuropsiquiátrico. De esta manera, la evaluación neuropsicológica en los niños será más profunda y precisará un abordaje más amplio. Te lo explicamos a continuación.
¿Qué implica una valoración neurológica?
Cuando hay retrasos significativos en el desarrollo general de un niño, es importante acudir a neurólogos especializados en población infantil. Esto se debe a que, en ocasiones, es difícil diferenciar variaciones del desarrollo típicas de un desarrollo psicopatológico.
Asimismo, el neurólogo valorará para identificar enfermedades, lesiones, procesos genéticos o del desarrollo que interfieran con el funcionamiento del sistema nervioso central (SNC) del pequeño. El examen neurológico consiste en:
- Revisión exhaustiva de la historia médica y de desarrollo del niño.
- Evaluación del estado mental.
- Valoración neurológica de la capacidad funcional del SNC, incluyendo los pares craneales.
- Examen de sistemas motores.
- Revisión de las funciones sensoriales.
- Exploración de las funciones autonómicas.
De la misma manera, el médico también evaluará el comportamiento del niño. Por ejemplo, sus expresiones faciales, asentimiento con la cabeza, parpadeo, mirada fija o tics, entre otros. Siguiendo esta línea, también valorará la relación del infante con los padres/cuidadores.
Valoración motora en la evaluación neuropsicológica infantil
Hoy en día, a partir de los cuatro años se lleva a cabo la revisión motora para observar el equilibrio del niño y el signo de Romberg. Un indicativo de la habilidad del niño de mantenerse en pie, quieto y con los ojos cerrados.
Tras ello, se estudian los reflejos y las funciones del cerebelo. Estas últimas se evalúan indicándole al pequeño que toque primero su nariz y luego el dedo del examinador en varias posiciones. En consecuencia, la dificultad de este para realizar la tarea puede ser un indicador de una disfunción cerebral. Posteriormente, se evalúan los pares craneales (Swaiman, Ashwal y Ferriero, 2006).
Pares craneales y anomalías comunes
Se examinan los sistemas sensoriales y la fuerza muscular. De este modo, se observa la habilidad de percibir vibraciones y reconocer la posición de los miembros. Para ello, el neurólogo toca varios lugares del cuerpo unilateralmente y bilateralmente mientras el niño tiene los ojos cerrados.
Por último, en cuanto a la fuerza muscular, se le indica que empuje su mano o pie contra la mano del examinador lo más fuerte que pueda. Otra prueba consiste en pedir al menor que camine con sus manos mientras el neurólogo sostiene sus pies; una vez los pies del menor están en el suelo, se le indica que se levante.
¿Cuándo se deriva un niño a un neurólogo?
Un examen o valoración neurológica debe ser considerado bajo las siguientes condiciones:
- Náuseas repentinas y prolongadas acompañadas por fiebre, dolor de cabeza y letargia.
- Movimientos oculares rápido, auras visuales (tipo de migraña que implica destellos de luz, visión borrosa, etc.) o espasmos musculares que sugieran actividad epiléptica.
- Alucinaciones visuales u olfatorias.
- Torpeza motora.
- Infecciones virales prolongadas que produzcan síntomas como los nombrados en la primera viñeta.
- Traumas craneales que produzcan nausea, visión borrosa, pérdida de consciencia o pupilas dilatadas.
- Implicación de los pares craneales que produzca debilidad motora (por ejemplo, boca caída).
Exámenes neuroradiológicos
Por otro lado, si existen signos neurológicos severos como convulsiones o disfasias, procedimientos como la tomografía computarizada (TC) y la resonancia magnética (RM) pueden ser herramientas útiles para identificar trastornos del desarrollo. Sin embargo, estas técnicas no son parte del proceso diagnóstico típico.
¿Cuándo derivar a una evaluación neuroradiológica?
Por lo general, un médico puede derivar al niño o adolescente a un examen neuroradiológico bajo las siguientes circunstancias:
- Traumatismo craneal.
- Tumores en el SNC.
- Enfermedad del SNC que involucren degeneración de la materia blanca (fibras axonales).
- Anomalías del neurodesarrollo que afecten el tamaño o la formación de las estructuras cerebrales (por ejemplo, hidrocefalia).
- Enfermedades cerebrovasculares.
- Trastornos del neurodesarrollo en los que haya historia de convulsiones, signos neurológicos y/o retrasos significativos del habla.
También se incluye a aquellos niños o adolescentes con trastornos del neurodesarrollo que afectan el tamaño cerebral, crecimiento de tejido o formaciones corticales.
Evaluación neuropsicológica infantil
La evaluación neuropsicológica incluye componentes de la evaluación psicológica. Se indaga sobre el funcionamiento social y/o emocional del niño, así como el estudio de las habilidades cognitivas, entre otros. Es de igual importancia el realizar procedimientos que incluyan el uso de herramientas como los test.
Aquí, los test o baterías neuropsicológicas se administran para investigar la relación que hay entre el cerebro y el comportamiento. Adicionalmente, uno de los objetivos es determinar si los déficits cognitivos y/o trastornos psiquiátricos están relacionados con un funcionamiento cerebral anormal. A continuación, mencionamos algunos test y entrevistas usados para conseguir dicho objetivo.
Evaluación multiaxial en neuropsicología: ¿Qué esferas se estudian?
Para empezar, se sugiere que se incorporen al menos seis paradigmas en el estudio de los trastornos infantiles, el biomédico, compartamental, psicodinámico, sociológico, familiar y cognitivo (Achenbach, 2005). De esta manera, Achenbach propone un “modelo de evaluación multiaxial” que comprende de los siguientes ejes:
- I: Reporte de los padres, Child Behavior Checklist (CBCL) (Achenbach y Edelbrock, 1991).
- II: Reporte de los profesores, Child Behavior Checklist Teacher’s Report Form (CBCL-TRF) (Achenbach, 1991).
- III: Evaluación cognitiva, Wechsler Intelligence Scale for Children Fourth Edition (WISC-IV) (Wechsler, 1949).
- IV: Examen físico, peso, talla y examen médico
- V: Evaluación directa, Child Behavior Checklist (CBCL) y Youth Self–Report (YSR) (Achenbach y Rescorla, 2001).
Los datos recogidos en esta evaluación informan al neuropsicólogo acerca del funcionamiento cognitivo, académico y psicosocial del niño. Además, esta información es de gran ayuda a la hora de describir hasta qué punto la disfunción cerebral afecta a áreas funcionales.
¿Cuándo derivar a una evaluación neuropsicológica infantil?
En cuanto a la evaluación neuropsicológica infantil se deriva en:
- Condiciones que afecten el SNC que hayan sido previamente descritas bajo derivaciones de neurología o neuroradiología (por ejemplo, traumatismos craneales y enfermedades del SNC).
- Déficits de aprendizaje graves y crónicos que no responden a tratamientos tradicionales (por ejemplo, cuando un niño tiene dificultades en el colegio y no consigue mejorar a pesar de acudir al psicólogo de la escuela).
- Problemas emocionales o comportamentales graves acompañados de retraso significativo en el habla o el desarrollo (por ejemplo, déficits motores, perceptuales, del lenguaje).
- Déficits agudos cognitivos (tales como memoria, atención), académicos, motores, del habla, comportamentales y trastornos de personalidad.
Importancia de la evaluación neuropsicológica infantil
Por otro lado, en la evaluación neuropsicológica existen dos funciones principales:
- Diagnosticar trastornos de desarrollo, lesiones cerebrales y enfermedades del SNC
- Valorar la eficacia del tratamiento y recuperación funcional del niño o adolescente
Integración de componentes neurológicos, neuroradiológicos y neuropsicológicos
Actualmente, los laboratorios médicos y las universidades exploran protocolos de investigación integradores que incluyan información neuroradiológica y neuropsicológica para comprender a fondo la naturaleza de los trastornos infantiles. Por ello, cabe destacar la importancia de una evaluación interdisciplinar que abarque ampliamente varias esferas funcionales en la vida del niño o adolescente.
De esta manera, los investigadores, psiquiatras y psicólogos revelan evidencias que conectan déficits neurocognitivos y neuropsicológicos con regiones cerebrales funcionales. Con el objetivo de establecer la conexión bidireccional entre la neuroanatomía y el funcionamiento neuropsicológico.
Normalmente, se empieza estudiando niveles funcionales y neuropsicológicos y se va construyendo la relación para establecer una conexión funcional-estructural. Así, se alcanza una mejor comprensión de los trastornos infantiles. Así, es importante hacer un esfuerzo en relacionar hallazgos que provengan del campo de la neuroradiología o neuroimagen y de la neuropsicología. Por último, es clave mencionar la repercusión de recoger en el informe neuropsicológico los comentarios y resultados obtenidos por cada profesional con relación a la evaluación global del niño o adolescente.
Conclusión
Una evaluación psicológica aporta información sobre el funcionamiento social y emocional del niño o adolescente. A su vez, la evaluación neuropsicológica en niños exhaustiva requiere de una valoración psicológica, neurológica, cognitiva y neuroradiológica que añada conocimiento sobre la función cerebral. Así como posibles aspectos del neurodesarrollo que puedan impactar negativamente el desarrollo cerebral y su función.
Estos esfuerzos interdisciplinares nos acercan a entender mejor el desencadenamiento de trastornos psiquiátricos o del neurodesarrollo en niños y adolescentes. Para adquirir herramientas necesarias en una valoración de estas características, te invitamos a nuestro curso sobre evaluación neuropsicológica en niños.
Referencias bibliográficas
- Benedet, M-. J. (1986). Evaluación neuropsicológica. Desclée De Brouwer.
- Milberg, W. y Hebben, N. (2010). Fundamentos para la evaluacion neuropsicologica. Manual Moderno.
- Portellano, J-.A. (2018). Evaluación neuropsicológica infantil. Editorial Síntesis.
Excelente artículo me encantó, además de estar bien detallado los procedimientos. Indudablemente las políticas educativas de de la Salud, deberían re valorar estos conceptos. Pará evitsr hacer diagnósticos con solo un test como lo es el wisch Iv.
Evitar rotular con trastornos o discapacidad sin antes recorrer algunos de estos pasos.
Excelente artículo me encantó, además de estar bien detallado los procedimientos. Indudablemente las políticas educativas y de la Salud, deberían re valorar estos conceptos. Pará evitar r hacer diagnósticos con solo un test, como lo es el wisch Iv.
Evitar rotular con trastornos o discapacidad sin antes recorrer algunos de estos pasos.
Muy buen articulo, ahora comprendo mejor en que casos es recomendada una evaluacion neuropsicologica.