Actualmente, el mundo entero se enfrenta a una crisis epidémica cuyas consecuencias afectan de manera global a toda la población. Esta epidemia trae consigo no solo consecuencias a nivel físico y social, sino que también supone una presión psicológica significativa. En esta nota queremos abordar un aspecto tan relevante como lo es la salud mental del  profesional sanitario hoy en día. Y es que, la incertidumbre y el estrés exigen una especial atención y promoción de la salud mental del personal sanitario. En consecuencia, es necesario destacar la importancia de promover el cuidado de la salud mental.

Retos a los que se enfrenta el personal sanitario

La Sociedad Española de Psiquiatría (SEP) define 7 retos a los que el personal sanitario debe hacer frente en esta crítica situación. Ahora bien, la SEP define estos siete puntos como “reacciones esperables en situaciones de tal magnitud e incertidumbre”.

Afirma, además, que “comprenderlas como reacciones normales ante tal situación contribuye a cuidarse”. Las mencionamos a continuación:

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  1. Desbordamiento de la demanda asistencial. Conforme aumenta el número de personas que requieren de asistencia médica, el personal sanitario también puede tener ciertas dificultades para atender oportunamente a todos los que lo necesitan.
  2. El riesgo de infección no se detiene. Miedo a infectarse y poder contagiar a familiares u otras personas del trabajo.
  3. Equipos insuficientes e incómodos.
  4. Proporcionar apoyo y atención sanitaria. Conforme aumenta la demanda médica, puede volverse más difícil el manejo de la angustia del paciente y su familia.
  5. Altos niveles de estrés en las zonas de atención directa.
  6. Exposición al desconsuelo de las familias. La incapacidad de acompañamiento del paciente por parte de las familias debido al COVID-19, genera gran desconsuelo y sufrimiento intenso. En consecuencia, el personal sanitario está muy expuesto ante este entorno de dolor.
  7. Dilemas éticos y morales. La falta de medios, la sobrecarga y la incertidumbre sobre la evolución de los pacientes hacen que, en ocasiones, el profesional se vea obligado a tomar decisiones complejas. Y, tales decisiones que deben ser tomadas en un tiempo breve generan intensos dilemas morales y culpa.

¿Cómo la salud mental del personal sanitario se ve afectada por el COVID-19?

Las posibles reacciones que puede presentar el personal sanitario ante situaciones de estrés intenso, según la SEP, pueden producir importantes consecuencias físicas, conductuales, emocionales y cognitivas. No obstante, se dice que son estas dos últimas (problemas emocionales y cognitivos) las causantes de las dos primeras (consecuencias físicas y de conducta).

Posibles consecuencias cognitivo-emocionales:

  • Ansiedad
  • Impotencia
  • Frustración
  • Miedo
  • Culpa
  • Irritabilidad
  • Tristeza
  • Anestesia emocional (sensación de falta de sentimiento, sentimientos vacíos, sensación de no estar viviendo el presente e inconsistencia de la vida)
  • Confusión o pensamientos contradictorios
  • Dificultades de concentración, para pensar de forma clara o tomar decisiones
  • Dificultades de memoria
  • Pensamientos obsesivos y dudas
  • Pesadillas
  • Negación
  • Sensación de irrealidad

Como podemos ver, las posibles consecuencias a nivel cognitivo-emocional son numerosas. Sin mencionar las posibles alteraciones físicas y conductuales que pueden ser resultado de estas.

Entre las consecuencias físicas encontramos dificultades respiratorias, hiperventilación, insomnio, cefaleas, mareos, temblores, sudoración, taquicardias, etcétera.

Y, a nivel conductual, destacaríamos la incapacidad de desconectarse del trabajo, hiperactividad, aislamiento, llanto incontrolado y dificultad para el autocuidado, entre otros. Lo cual afectaría de manera importante aspectos de la salud mental en el personal sanitario, siendo necesario promover diversas estrategias de manejo.

Pautas de cuidado de salud mental en el personal sanitario

Es probable que, bajo un contexto como el actual, exista un aumento de estrés generalizado en personal sanitario. Esto puede presentarse tanto a nivel laboral por la saturación de pacientes en su servicio, como en el ámbito personal frente a la posibilidad de contagiarse o no saber afrontar adecuadamente la situación.

Sin embargo, es importante recordar que para cuidar de los demás, debemos cuidar de nosotros mismos primero. Por ello, las pautas establecidas para promover la salud mental del profesional sanitario están especialmente centradas en el autocuidado. Entre ellas encontramos:

  • Cuidar las necesidades básicas
  • Descansar
  • Estar en contacto con la familia y seres queridos
  • Limitar la exposición a los medios de comunicación
  • Auto-observación. Ser consciente de cómo se siente y permitirse pedir ayuda si lo necesita
  • Planificar una rutina fuera del trabajo

Recomendaciones adicionales

Los expertos recomiendan emplear estrategias de regulación emocional que sean útiles para promover la salud mental en la persona. Por ejemplo, técnicas de respiración, atención plena o ejercicio físico, entre otras. Dado que pueden ser útiles para la desactivación emocional, fisiológica y/o cognitiva.

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Además, se considera fundamental la ventilación emocional. Esto es, la competencia emocional y la fortaleza no es incompatible con sentir miedo, descontrol, irritabilidad o confusión.

Las emociones anteriores solo afirman que somos humanos.

Compartir nuestras emociones con alguien que transmita seguridad produce que se vuelvan más tolerables y, así, facilitan el proceso de regulación.

Por último, resulta imprescindible validarse, es decir, tener en cuenta que a pesar de los obstáculos, se está cumpliendo una gran misión.

Es necesario que haya un reconocimiento hacia los demás compañeros, ya sea formal o informalmente, pero también un reconocimiento a uno mismo.

No obstante, si la situación parece desbordarnos, es importante acudir a un especialista de la salud mental que pueda brindarnos un espacio seguro en el que canalizar las emociones.

Conclusión

Ante la situación actual derivada del brote de coronavirus en el mundo, es fundamental reconocer la labor que están llevando a cabo los profesionales sanitario. Profesionales que diariamente están trabajando con personas afectadas por el virus, aquellas que podrían estarlo y sus respectivas familias.

Esta nota pretende ayudar a promover el cuidado de la salud mental, muy necesario en esta época. Y, por supuesto, entender que el cuidado de la salud mental es fundamental en todos aquellos que están enfrentando este duro momento, por lo que acudir a un especialista es altamente recomendado.

Referencias bibliográficas

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