¿Cuántas veces postergamos realizar un trámite, entregar una tarea o simplemente ordenar y limpiar la casa? Esta tendencia a retrasar la realización de actividades tiene un nombre: procrastinación. La mayoría de nosotros la sufrimos en mayor o menor medida, pero hay grupos etarios que suelen manifestarla con mayor intensidad. Incluso, hay factores que nos hacen más propensos a tener dicha conducta; uno de ellos es la tendencia compulsiva al uso del teléfono móvil. Si quieres conocer más sobre cómo afecta el uso excesivo del celular a la conducta de procrastinación, te invitamos a leer la siguiente nota.

Uso excesivo del celular y procrastinar

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Para empezar, resulta crucial definir este término. La procrastinación se refiere a la tendencia a postergar voluntariamente las actividades que se deben realizar, a pesar de conocer las consecuencias negativas del retraso. Es un comportamiento caracterizado por posponer acciones importantes o urgentes en favor de actividades menos prioritarias, lo que puede dar como resultado estrés, ansiedad, baja productividad y sentimientos de culpa.

Particularmente, muchos de los estudiantes en sus diferentes etapas educativas exhiben conductas de procrastinación. En este contexto, la utilización excesiva del teléfono móvil se ha identificado como un factor de riesgo significativo para este comportamiento. A raíz de esto, se vuelve relevante comprender los factores de riesgo que contribuyen al problema, para abordarlo de manera efectiva. Pero, ¿A qué nos referimos cuando hablamos del uso excesivo del celular?

Uso excesivo del teléfono móvil

Para empezar, esta conducta problemática en relación con el teléfono móvil es un fenómeno prevalente entre los grupos de estudiantes, particularmente adolescentes y adultos jóvenes. Debemos considerar que estos individuos se encuentran en una etapa crítica de la conformación de su personalidad, con transiciones continuas en el desarrollo cerebral, y a menudo muestran un pobre autocontrol, lo que los hace susceptibles a comportamientos de esta índole.

Por si fuera poco, como nativos digitales, los alumnos crecieron con los smartphones y los han integrado en su estilo de vida e identidad. Respecto a qué tan frecuente es este fenómeno, investigaciones anteriores han demostrado que su prevalencia varía significativamente, con una media del 23.3 %.

Correlación entre ambos fenómenos

El mecanismo detrás de la correlación entre el abuso del celular y la procrastinación no está claro, pero hay algunas explicaciones posibles. Primero, la mala gestión del tiempo puede ser el vínculo más directo entre ambos: los estudiantes con alto uso problemático del celular suelen planificar mal sus actividades. Segundo, el bajo autocontrol también es un factor clave, ya que tienden a enfocarse en el entretenimiento que ofrecen los smartphones, retrasando así sus tareas. Finalmente, investigaciones indican que este tipo de comportamientos pueden dañar la corteza prefrontal, afectando la autorregulación, lo que conduce a la procrastinación.

¿Qué factores modulan la relación?

La época es una variable que puede moderar dicha relación. Con el desarrollo de la tecnología de comunicación moderna, el número de usuarios de celulares ha aumentado drásticamente y se espera que siga creciendo. En este sentido, el aumento del número de usuarios y el hecho de que cada vez forman parte de nuestra vida cotidiana, tienen un impacto directo en el riesgo del uso excesivo del celular.

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¿Y qué impacto tiene la cultura?

Los valores de las diferentes culturas también impactan en la inclinación hacia estas conductas. En términos generales, las culturas orientales prefieren la comunicación indirecta haciendo mayor uso de gestos y expresiones no verbales, mientras que las occidentales optan por una comunicación directa y explícita, donde la información se transmite principalmente a través de palabras habladas o escritas. Así, las diferencias en los estilos de comunicación pueden influir en cómo las personas usan los teléfonos móviles y, por lo tanto, la dependencia del celular y posteriormente en la procrastinación.

En búsqueda de respuestas…

Con el fin de ahondar en este tema, se llevó a cabo un metaanálisis, cuyo propósito fue explorar la correlación entre el uso excesivo del teléfono móvil y la procrastinación en estudiantes. Además, se analizó si esta correlación estaba moderada por el nivel educativo, el sexo, la cultura y el año de publicación. Para ello, se llevó a cabo una búsqueda exhaustiva en varias bases de datos, incluyendo un total de 75 estudios publicados entre 2014 y 2022. A continuación, se presentan algunos de los principales hallazgos de esta investigación.

¿Procrastinación de tareas para usar el celular?

En líneas generales, el uso problemático del teléfono móvil y la procrastinación están moderadamente correlacionadas de manera positiva. Además, el metaanálisis reveló que dicha relación no es constante, sino que varía según ciertos factores. En concreto, el nivel educativo, el sexo y la cultura de los individuos influyen significativamente.

Influencia de las características individuales en la procrastinación

En primer lugar, el nivel educativo tiene un impacto considerable en la correlación entre la conducta de procrastinación y el uso problemático del celular. La relación es más fuerte entre los estudiantes de secundaria, seguida por los universitarios. Esto es así, ya que los alumnos de secundaria, bajo gran presión académica y con un pobre autocontrol, son más propensos a usar sus teléfonos móviles para el entretenimiento, lo que aumenta la procrastinación. En contraste, los universitarios, con mejor autocontrol, gestionan mejor su tiempo y postergan menos sus actividades y tareas.

Por otro lado, esta correlación también se ve influenciada según el sexo, siendo más alta en hombres que en mujeres. Una hipótesis explicativa que plantean los autores sería que los hombres, más propensos a adoptar estilos de afrontamiento negativos, corren un mayor riesgo de enganche al teléfono. En contraposición, las mujeres, con mayor capacidad para regular la atención y suprimir impulsos, tienden a cumplir con sus responsabilidades a tiempo, reduciendo así la procrastinación.

Limitaciones de la investigación

A pesar de los reveladores hallazgos, es importante considerar algunas limitaciones al interpretar los resultados del metaanálisis. Entre ellas, la alta heterogeneidad entre los estudios incluidos. Por otro lado, también se observó una falta de estudios que abordaran suficientes variables moderadoras, y aunque se llevaron a cabo pruebas para evaluar el sesgo de publicación, siempre existe la posibilidad de que estudios no publicados afecten los resultados. Estas cuestiones sugieren la necesidad de más investigaciones para validar y ampliar los hallazgos.

Reflexiones finales

La procrastinación entre los estudiantes, exacerbada por la dependencia al teléfono móvil, impacta negativamente el rendimiento académico, la salud mental y las relaciones interpersonales. Abordar estos factores es esencial para mitigar estos efectos adversos.

De esta forma, si bien ofrece grandes beneficios, también nos enfrenta a desafíos como el uso compulsivo y la distracción. Por lo tanto, se vuelve crucial encontrar un equilibrio que nos permita disfrutar de sus ventajas sin dejar que nos domine. En último lugar, si quieres aprender más sobre el impacto neuropsicológico de la tecnología, te recomendamos nuestro curso en neuropsicología y telepantallas.

Referencia bibliográfica

  • Zhou, X., Yang, F., Chen, Y. y Gao, Y. (2023). The correlation between mobile phone addiction and procrastination in students: A meta-analysis. Journal of affective disorders. Doi: 0.1016/j.jad.2023.11.020