Durante años, distintos artistas han utilizado su arte para hablar de temas incómodos, visibilizar el sufrimiento y reivindicar la vulnerabilidad como una forma de fortaleza. En el caso de Lady Gaga, entre sus múltiples declaraciones públicas, una de las más resonantes fue la confesión de haber experimentado un episodio de psicosis. Consecuentemente, en una cultura que aún estigmatiza severamente los trastornos mentales graves, su testimonio resultó disruptivo. Ahora bien, ¿qué significa realmente atravesar una psicosis? ¿Cómo puede el testimonio de Gaga contribuir a la percepción que se tiene de la salud mental?
La confesión que hizo eco en el mundo
La revelación llegó en 2020 durante una entrevista en el marco del documental The Me You Can’t See, producido junto a Oprah Winfrey y el príncipe Harry. En él, Lady Gaga habló abiertamente sobre el abuso sexual que sufrió a los 19 años y cómo, tiempo después, desarrolló síntomas asociados al trastorno de estrés postraumático (TEPT).
Dentro del mencionado cuadro, relató haber atravesado episodios de disociación, pensamientos caóticos y lo que describió como un brote psicótico. Esta declaración, lejos de ser superficial, invitó a comprender la complejidad del sufrimiento psicológico y abrió un debate sobre el silencio que recae sobre los trastornos mentales severos.
Pero… ¿Qué es exactamente la psicosis?
En términos clínicos, la psicosis no es un diagnóstico en sí mismo, sino un conjunto de síntomas que alteran gravemente la percepción de la realidad. Puede incluir alucinaciones (percepciones sin estímulo externo), delirios (creencias erróneas mantenidas con convicción), desorganización del pensamiento, y pérdida del juicio de realidad.
Dichas manifestaciones pueden aparecer en trastornos como la esquizofrenia, el trastorno esquizoafectivo, algunos casos de depresión o trastorno bipolar. Incluso también en contextos de trauma agudo o consumo de sustancias (American Psychiatric Association, 2022).
Particularmente, en el caso de Lady Gaga, el episodio psicótico formó parte de un cuadro más amplio vinculado al trauma. Lo anterior coincide con lo que señala la literatura actual, sobre la relación entre el estado de alteración de la realidad, y el trauma infantil. En tal sentido, son diversos los estudios que han encontrado una asociación significativa entre experiencias tempranas de abuso, negligencia o violencia, y el desarrollo posterior de síntomas psicóticos, especialmente en contextos de estrés elevado (Varese et al., 2012).
Trauma, disociación y experiencias extremas
Su historia pone sobre la mesa un punto fundamental. La psicosis no siempre implica un diagnóstico crónico ni necesariamente una enfermedad degenerativa.
En algunos casos, como en los trastornos relacionados con el trauma, es posible que se presente de forma episódica, acompañada de síntomas disociativos como la desconexión con el entorno o con el propio cuerpo. La disociación actúa como un mecanismo de defensa ante situaciones extremas, aunque en ciertos contextos puede desencadenar una alteración profunda de la realidad (Lanius, Paulsen y Corrigan, 2014).
Además, el caso visibiliza una dimensión muchas veces olvidada: la coexistencia de sufrimiento y funcionalidad. No solo continuó con su carrera, sino que transformó el dolor en activismo y en obra artística. Lo dicho pone en cuestión la imagen del mencionado trastorno como un estado totalmente incapacitante, y reafirma la importancia de entender los fenómenos expuestos desde una perspectiva más matizada.
El poder de la visibilidad
Que una artista tan importante como Lady Gaga hable de psicosis tiene un efecto multiplicador. Por un lado, permite que muchas personas se identifiquen y se sientan menos solas. Por otro, obliga a replantear los estereotipos con los que cargan quienes atraviesan trastornos mentales graves.
En la cultura popular, la presente afección suele ser retratada como peligrosa, impredecible o irremediablemente patológica. Sin embargo, investigaciones muestran que el estigma hacia este tipo de síntomas es una de las principales barreras para buscar ayuda y sostener un tratamiento (Yanos, et al., 2015).
El tal contexto es que Gaga materializa su activismo creando la fundación Born This Way, la cual impulsa campañas de salud mental, inclusión y acompañamiento emocional. Lejos de quedarse en el testimonio personal, su trabajo articula lo biográfico con lo colectivo, potenciando el mensaje y ampliando el alcance.
El lenguaje importa: Hablar sin miedo
Usar términos como brote psicótico en primera persona, sin adornos ni eufemismos, contribuye a desestigmatizar. En efecto, el modo en que se nombra la experiencia importa tanto como la experiencia misma.
De hecho, en psicología clínica se ha discutido la necesidad de incorporar modelos más integradores que no solo expliquen la psicosis desde lo biológico. Sino que, además, tengan en cuenta la historia de vida, el contexto social y los factores emocionales implicados (Johnstone et al., 2018).
Hablar de psicosis y salud mental sin miedo, como propone Lady Gaga, implica correr el eje de lo patológico y acercarlo a lo humano. En lugar de encasillar, se trata de comprender. En vez de señalar, de acompañar. Y sobre todo, de asumir que nadie está exento del sufrimiento psíquico.
Un cambio en salud mental
La historia de Lady Gaga ilustra un cambio de época en el abordaje de la psicosis y la salud mental. Mientras antes predominaba el silencio o la vergüenza, hoy empieza a abrirse paso una narrativa diferente: la que reconoce la fragilidad como parte de la condición humana y no como un defecto que hay que ocultar. Al compartir su experiencia, Gaga no solo ayuda a comprender mejor este fenómeno, sino que desafía los prejuicios sociales y aporta un modelo alternativo de afrontamiento.
En definitiva, cuando una figura pública se atreve a contar su verdad con honestidad, el mensaje trasciende: no se trata de heroísmo ni de marketing, sino de crear un espacio donde otros también puedan hablar sin miedo. Y en tiempos donde la salud mental sigue siendo una deuda pendiente en muchos rincones del mundo, ese gesto, aunque simbólico, tiene un impacto real. En caso de que te interese aprender más acerca de la evaluación, diagnóstico y tratamiento de las psicosis, te invitamos a nuestro curso sobre psicosis y herramientas clínicas para su abordaje.
Referencias bibliográficas
- American Psychiatric Association. (2022). Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (5th ed., text rev.; DSM-5-TR). American Psychiatric Publishing.
- Johnstone, L., Boyle, M., Cromby, J., Dillon, J., Harper, D., Kinderman, P., Longden, E., Pilgrim, D., Read, J., Bentall, R., Waddingham, R. y Sommer, I. E. (2018). The Power Threat Meaning Framework: Overview. British Psychological Society.
- Lanius, R. A., Paulsen, S. y Corrigan, F. M. (2014). Neurobiology and treatment of traumatic dissociation: Toward an embodied self. Springer Publishing Company.
- The Me You Can’t See. (2021). [Serie documental]. Apple TV+.
- Varese, F., Smeets, F., Drukker, M., Lieverse, R., Lataster, T., Viechtbauer, W., Read, J., van Os, J. y Bentall, R. P. (2012). Childhood adversities increase the risk of psychosis: A meta-analysis of patient-control, prospective-and cross-sectional cohort studies. Schizophrenia Bulletin, 38(4), 661-671. https://doi.org/10.1093/schbul/sbs050
- Yanos, P. T., Lucksted, A., Drapalski, A. L., Roe, D. y Lysaker, P. H. (2015). Interventions targeting mental health self-stigma: A review and comparison. Psychiatric Rehabilitation Journal, 38(2), 171-178. https://doi.org/10.1037/prj0000100