Los años de educación primaria son fundamentales en el desarrollo de un niño, ya que no solo marcan su ingreso al ámbito educativo formal, sino que también es el período en el que se desarrollan muchas funciones cognitivas y habilidades esenciales para la vida. Sin embargo, el modelo educativo ha permanecido prácticamente inalterado durante años: los niños pasan varias horas sentados, escuchando a un docente. Recientemente, se ha introducido la idea de que la actividad física puede potenciar el éxito académico. Pero, ¿Cómo se relacionan el aprendizaje y el movimiento? Te invitamos a continuar leyendo acerca de hallazgos recientes en el área.
Antes que nada, ¿cómo se relacionan la salud y la educación?
El desempeño académico en los primeros años escolares está estrechamente vinculado a los comportamientos relacionados con la salud. Especialmente, se asocia a las actividades físicas de los niños, ya que las funciones cognitivas se ven beneficiada de esta. Además, incorporar el ejercicio físico en el plan de estudios escolar ayuda a reducir el sedentarismo. Por tanto, es posible que existan ventajas para el aprendizaje de los menores al participar en propuestas que impliquen movimiento dentro de la clase.
En esta misma línea, la hipótesis de estimulación cognitiva sostiene que las actividades físicas exigentes mejoran funciones como la resolución de problemas, memoria y función ejecutiva. Consecuentemente, se ve potenciado el rendimiento académico en diversas áreas, como la matemática y lectura en niños de primaria. Además, está claro que dichos ejercicios mejoran la salud, incluyendo la condición física, el índice de masa corporal y la reducción de la ansiedad.
Pero, ¿qué sucede en la realidad?
A pesar de los beneficios mencionados, las instituciones educativas fomentan el comportamiento sedentario en el aula, obligando a los alumnos a estar sentados la mayor parte del tiempo. Esto ha llevado a una disminución significativa del ejercicio físico entre los estudiantes, convirtiéndose en una preocupación importante de salud pública.
Incluso los números lo demuestran, ya que alrededor de 4 de cada 5 niños de primaria no cumplen con los niveles de actividad física recomendados. En este contexto, se vuelve evidente que las clases curriculares de educación física por sí solas no pueden proporcionar suficientes oportunidades para que los alumnos cumplan con los niveles recomendados de movimiento.
Combinando movimiento y aprendizaje
Una forma de introducir el movimiento en la escuela es a través de las Intervenciones de pausas de actividad física en el aula (in-classroom physical activity breaks, IcPAB, en inglés). Las mismas se refieren a cualquier propuesta que implique el movimiento físico dentro del aula durante el horario regular de clases. No obstante, existen múltiples maneras de llevarlo a cabo. Algunas posibilidades son: breves períodos de ejercicio realizados como recreo de la instrucción académica, breves pausas de movimiento que incluyan contenido del currículo, o como una integración de la actividad física en lecciones de áreas de aprendizaje, aparte de la educación física.
Así, parecería ser que el aula es un entorno ideal para implementar intervenciones basadas en la actividad física. No solo asegura su llegada a los niños, sino también, permite a los maestros decidir cuándo realizar una pausa activa. Por dicho motivo, se ha evaluado la relación de estas pausas activas con diversas variables, independientemente de las desigualdades sociodemográficas de los estudiantes. Dentro de dichas variables analizadas nos encontramos con: el éxito académico, la función cognitiva, los comportamientos de salud (como niveles de actividad física o sedentarismo) y la condición física.
Evaluando el éxito académico y actividad física
Algunas investigaciones actuales sugieren que los recreos de movimiento en el aula tienen efectos prometedores sobre el aprendizaje. Sin embargo, las revisiones previas no han arribado a conclusiones sólidas.
Por lo tanto, un metaanálisis, publicado en la revista International Journal of Environmental Research and Public Health, tuvo por objetivo revisar sistemáticamente las características, fundamentos teóricos y las evaluaciones de las IcPAB.
Arrojando luz sobre la temática…
En relación a las características de las intervenciones y sus participantes, en total, se analizaron datos de 1538 estudiantes de primaria. La duración de la intervención fue generalmente inferior a 12 semanas, con recreos de ejercicio de al menos 10 minutos.
Así, estos descansos de actividad física en el aula utilizados en las intervenciones variaron desde ejercicios físicos dirigidos por profesores hasta propuestas basadas en videos. Mientras que algunos estudios los vincularon al currículo, en otros se emplearon como pausas activas o tareas cognitivamente desafiantes.
Efectividad: Ejercicio en el aula
Los hallazgos sugieren que el impacto de las IcPAB sobre la función cognitiva de los niños de primaria es inconsistente y variado, posiblemente debido a la calidad, el contenido y la estandarización de las evaluaciones. Asimismo, los niveles de demanda cognitiva de la actividad física influyen en las mejoras de la cognición. Por lo tanto, es posible que los descansos de ejercicio no hayan sido lo suficientemente exigentes a nivel cognitivo.
El análisis cuantitativo mostró un pequeño impacto positivo en el rendimiento en matemáticas para los grupos de intervención, aunque este efecto fue leve y no estadísticamente significativo. Esta diferencia tampoco fue significativa para las habilidades de lectura. Sin embargo, la efectividad de los IcPAB en las habilidades de ortografía reveló un impacto positivo y significativo, sugiriendo que los descansos de actividad física en el aula podrían mejorar el rendimiento en ortografía de los niños de primaria. En esta misma línea, otro estudio confirmó que IcPAB es efectivo para mejorar la capacidad de aprendizaje de un idioma extranjero, mostrando un impacto significativo y de moderado a grande.
¿Cómo afecta en la salud física?
Se encontró que los niveles de actividad física de los alumnos de primaria mejoraron con las IcPAB. En contraposición, no se vieron mejoras en el conteo de pasos ni en el comportamiento sedentario. Por lo que se recomienda interpretar los resultados sobre comportamientos relacionados con la salud con cautela.
Limitaciones
Los autores nos advierten de ciertos aspectos a tener en cuenta a la hora de interpretar correctamente los resultados de este metaanálisis. En primer lugar, es necesario identificar la intensidad adecuada de las intervenciones IcPAB en un futuro. Adicionalmente, ninguno de los estudios analizó la dieta y la ingesta de suplementos vitamínicos, aspectos importantes para el crecimiento y la educación infantil.
Por otro lado, sugieren la necesidad de marcos teóricos en el diseño de intervenciones IcPAB, con una evaluación de procesos y métodos de fidelidad bien explicados. Por último, cabe mencionar que todos los estudios se realizaron en países de altos ingresos. Lo anterior, resalta la necesidad de más investigaciones en este ámbito, especialmente en países con ingresos menores.
El ejercicio físico como asignatura pendiente
Este estudio revisa los efectos de los IcPAB en el éxito académico y otras variables relacionadas. Los resultados mostraron que, efectivamente, tiene efectos positivos en el rendimiento en ortografía y aprendizaje de idiomas, pero no en matemáticas ni lectura. Además, se observó una relativa mejora en los niveles de actividad física. Así, se concluye que, a pesar de los hallazgos positivos, se necesita más investigación y evaluaciones de procesos confiables para comprender mejor los efectos de IcPAB en los estudiantes de primaria.
En próximas investigaciones, es necesario identificar la intensidad adecuada de las intervenciones IcPAB. Además, ninguno de los estudios analizó la dieta y la ingesta de suplementos vitamínicos, aspectos importantes para el crecimiento y la educación infantil. Por último, si te interesa conocer diversas estrategias para potenciar el aprendizaje, te recomendamos nuestro curso sobre cómo aprender con todo el cuerpo y los beneficios del movimiento, rutinas de pensamiento y recreos cerebrales.
Referencia bibliográfica
- Peiris, D. L. I. H. K., Duan, Y., Vandelanotte, C., Liang, W., Yang, M. y Baker, J. S. (2022). Effects of In-Classroom Physical Activity Breaks on Children’s Academic Performance, Cognition, Health Behaviours and Health Outcomes: A Systematic Review and Meta-Analysis of Randomised Controlled Trials. International journal of environmental research and public health, 19(15), 9479. Doi: 10.3390/ijerph19159479