La dislexia es un trastorno específico del aprendizaje que se caracteriza por una dificultad en la comprensión oral y escrita del lenguaje. Se constituye como uno de los problemas de aprendizaje más frecuentes en la población infantil y, a pesar de ser conocido, son numerosos los casos que permanecen sin diagnosticar. Por ello, puesto que la detección temprana tiene su impacto en el área emocional y la autoestima del menor, es necesario saber qué sucede con el alumno que tiene dificultades escolares. Hacerlo implicará conocer sus potencialidades y deficiencias para ayudarle de manera específica a mejorarlas. Mitigando, así, las consecuencias adversas secundarias de la dislexia. Profundicemos un poco.

¿Qué es la dislexia?

Según el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders, Fifth Edition, DSM-V, en inglés), la dislexia se incluye dentro de la clasificación de las dificultades específicas de aprendizaje, definidas como un “desorden en uno u más de los procesos básicos que involucran la comprensión oral y escrita del lenguaje”. Apareciendo en personas con un desarrollo cognitivo o inteligencia normal o alta, que no padecen alteraciones sensoriales perceptibles y que han recibido una instrucción adecuada.

Dislexia: La importancia de una detección temprana

Los desafíos que pueden observarse en la escuela se concretan en distintas áreas. Ya sea el pensamiento, habla, lectura, escritura, deletreo o dificultad para manejar signos matemáticos.

Cuestiones que, a veces, se asocian de manera equívoca a que el niño es perezoso o poco inteligente. Sin embargo, la dislexia no está asociada con el coeficiente intelectual.

Las dificultades no se limitan al ámbito escolar 

La complejidad del funcionamiento cognitivo en los pequeños con dificultades específicas de aprendizaje se puede apreciar en un contexto múltiple. Y es que, a expensas de lo que pueda pensarse, los desafíos no se limitan al trabajo escolar sino que forman parte de su manera de ser, ya que influyen en todas sus relaciones sociales. Aspecto, este último, importante en cualquier sociedad. Y más en las desarrolladas como la nuestra, en la que parte fundamental de la cultura y modo de vida se transmite mediante el lenguaje escrito.

Patologías asociadas

Hay muchas otras condiciones psiquiátricas y del desarrollo que con frecuencia son comórbidas. Entre ellas:

  • Trastornos de la atención
  • Hiperactividad
  • Hipoactividad
  • Disfasia (trastorno específico del lenguaje)
  • Disgrafía (trastorno del aprendizaje de la escritura)
  • Discalculia (trastorno del aprendizaje de las matemáticas)
  • Dispraxia (trastorno del desarrollo de la coordinación) 
  • Trastornos del comportamiento
  • Trastornos emocionales

¿Cómo identificar a un alumno con dislexia?

Síntomas esperables

qué es dislexia

Hay que considerar que el perfil de las personas con dislexia es heterogéneo, mismamente, por ejemplo, no todas las personas con dislexia muestran discapacidades fonológicas y no todas las personas con deficiencias fonológicas desarrollan dislexia. Aún así, existe una serie de manifestaciones específicas que nos pueden llevar a sospechar de la existencia de este trastorno.

El conocimiento de dichos signos o manifestaciones nos ayudará a actuar de forma preventiva, evitando que el problema adquiera una significación mayor. Los alumnos con dislexia manifiestan dificultades tanto de precisión como velocidad lectora.

A su vez, están limitados en la cantidad de recursos cognitivos que pueden utilizar para llevar a cabo una lectura comprensiva. Al menos del nivel que se exige en un ámbito escolar. Además, su escritura también puede verse afectada, lo que podría impactar en un elevado número de errores ortográficos.

Síntomas esperables que pueden detallarse según la edad cronológica

Niños de 3 a 6 años

  • Historia familiar de dificultades escolares
  • Retraso en la adquisición del habla
  • Dificultades para aprender series (p. ej., colores, días de la semana, serie numérica)
  • Confusión en orientación espacial y nociones temporales
  • Dificultades para rimar, establecer el sonido inicial de las palabras, la relación entre la imagen y sonido de las letras

Niños de 7 a 11 años

  • Lectura lenta o silabeante
  • Lectura poco precisa y con mucho esfuerzo
  • Dificultad para la comprensión de textos
  • Inversiones, omisiones, sustituciones y traslados de letras, números y palabras
  • Dificultad para el deletreo de palabras conocidas y en el manejo de la ortografía
  • Expresión escrita desorganizada y con una gramática deficitaria
  • Dificultad para resolver cálculos, aprender las tablas y resolver problemas
  • Conductas evitativas frente a tareas escolares
  • Periodos cortos de atención

Posibles consecuencias de la dislexia

La dislexia frecuentemente genera problemas sociales, emocionales y conductuales. Y es que, las dificultades que presentan los niños para acceder al lenguaje les hacen perder la confianza en sí mismos. Lo que puede generar fracaso o deserción escolar y problemas de adaptación social.

Condiciones comórbidas

Si bien los llamados “efectos colaterales” son variados, generalmente se pueden observar:

  • Baja autoestima y autoconcepto
  • Desinterés por el estudio, que puede llegar a convertirse en fobia escolar
  • Alto nivel de frustración
  • Calificaciones escolares bajas
  • Marginación en grupos de pares
  • Creencias erróneas sobre el niño
  • Problemas vinculados a la dinámica familiar 
  • Conductas disruptivas
  • Ansiedad o sentimientos de vergüenza

Un diagnóstico tardío en la dislexia

Las características de la dislexia suelen detectarse en primaria, pero en algunos estudiantes se notan mucha más tarde (o los déficits surgen posteriormente) dando paso a un diagnóstico de dislexia tardío. En este, el desempeño en lectoescritura y otros correlatos cognitivos subyacentes pueden llegar a ser comparables al de los estudiantes con diagnóstico temprano. Habiendo de prestárseles las mismas oportunidades de compensación y programas de recuperación o intervención (Bazen et al., 2020). 

¿Por qué es clave la detección temprana?

La detección temprana no implica una “cura” del trastorno, pero puede disminuir sus consecuencias y propiciar a la persona diversas herramientas para compensar sus dificultades. Así, cuanto más temprana sea la detección, con su consiguiente evaluación neuropsicológicamayores posibilidades de éxito en su rendimiento escolar. Es por esto que, resulta de suma importancia tener claro cuáles son los síntomas esperables, para así poder detectarlos y comenzar con un plan de acción.

En ocasiones, algunos profesionales de pediatría renuncian a utilizar la dislexia como etiqueta de diagnóstico, lo que puede conllevar dificultades de aprendizaje que no solo persisten, sino que empeoran. Por lo cual, una intervención a tiempo apropiada y mejora en el proceso de la lectura generará beneficios en su desempeño académico y a nivel personal. (Sanfilippo et al., 2020).

Conclusión 

Los procesos de lectura y escritura son utilizados de manera constante en nuestra vida cotidiana. Por ende, el impacto de la dislexia en una persona se manifiestará de forma transversal.

Estar alerta a las señales mínimas que cada niño presenta, y trabajar de manera precoz, optimizará sus habilidades, repercutiendo en su trayectoria de aprendizaje específica. Se logrará, así, que la persona pueda convivir con el trastorno de la manera más funcional posible.

Si bien la dislexia es persistente a lo largo de la vida, cabe destacar que, si se acompaña de adecuaciones de acceso, metodológicas y de evaluación, se podrá seguir el mismo ritmo de aprendizaje y adquisición de contenidos que los pares.

Referencias bibliográficas

  • American Psychiatric Association. (2013). Diagnostic and statistical manual of mental disorders (5th ed.). https://doi.org/10.1176/appi.books.9780890425596
  • Asociación Andaluza de Dislexia. (2010). Guía general sobre dislexia. https://integratek.es/blog/2014/05/20/guia-dislexia-asandis/
  • Bazen, L., van den Boer, M., de Jong, P. F. y de Bree, E. H. (2020). Early and late diagnosed dyslexia in secondary school: Performance on literacy skills and cognitive correlates. Dyslexia (Chichester, England)26(4), 359-376. https://doi.org/10.1002/dys.1652
  • López, L. (2019). Detección temprana de la dislexia basada en el modelo de respuesta a la intervención [Tesis de Grado, Universidad de la Laguna]. Repositorio de la Universidad Internacional de la Laguna.
  • Pérez de Arrilucea, I. (2014)La detección temprana de la dislexia y su intervención en educación [Tesis de Grado, Universidad Internacional de La Rioja]. Repositorio de la Universidad Internacional de La Rioja (Re-Unir).
  • Sanfilippo, J., Ness, M., Petscher, Y., Rappaport, L., Zuckerman, B. y Gaab, N. (2020). Reintroducing Dyslexia: Early Identification and Implications for Pediatric Practice. Pediatrics146(1), e20193046. https://doi.org/10.1542/peds.2019-3046
  • Tamayo, S. (2017). La dislexia y las dificultades en la adquisición de la lectoescritura. Profesorado, Revista de Currículum y Formación del Profesorado21(1), 423-432. https://doi.org/10.30827/profesorado.v21i1.10372
  • Villagra, A. (2020). Dislexia, detección temprana e impacto emocional [Tesis de Grado, Universidad FASTA]. Repositorio institucional de la Universidad FASTA.