El funcionamiento de nuestro cerebro en situaciones sociales ha sido ampliamente estudiado por diversas disciplinas. La neurociencia, en particular, dio cuenta de que la oxitocina tiene un rol fundamental en tales actividades. Sobre todo, en lo que refiere al comportamiento humano y las emociones. Dada su gran importancia, en cuanto los niveles de concentración de esta hormona están disminuidos, concomitantemente se han observado altos niveles de desapego emocional y falta de empatía. Por tal motivo, comenzó a investigarse si nuestras conductas podrían verse modificadas al administrar de forma externa esta hormona. A continuación, descubriremos cómo funciona la administración de oxitocina en aerosol y qué efectos tiene en nuestra conducta.

Primero que nada, ¿qué es la oxitocina?

La oxitocina es una hormona conformada por 9 aminoácidos. Su síntesis se produce a nivel de las neuronas del núcleo supraóptico y del núcleo paraventricular hipotalámicos. Tales neuronas, se extienden hasta la hipófisis posterior donde se produce la liberación de oxitocina al torrente sanguíneo, para así alcanzar los órganos periféricos y cerebro.

oxitocina en aerosol. efectos de la oxitocina

Así, se ejerce un efecto regulador del comportamiento humano y las emociones. Esto sucede como consecuencia de la regulación del eje hipotálamo-pituitario-suprarrenal, una reducción en el nivel de cortisol, la activación del nervio vago, y la modulación de la amígdala, corteza prefrontal y sistemas de neurotransmisores.

La hormona de la moral

Continuando con lo anterior, esta hormona tiene un papel fundamental en la adopción de comportamientos más sensibles y emocionales. De forma que interviene en la cooperación, es decir, el nivel de altruismo demostrado a través de las acciones y la confianza. Adicionalmente, la oxitocina cumple diversas funciones. Entre ellas, funciones reproductivas durante el proceso del parto, en la lactancia y el comportamiento materno. Por todo esto, se la conoce comúnmente como la hormona de la moral (Morocho-Parra et al., 2024).

¿Y si se encuentra disminuida?

Cuando la concentración de oxitocina es reducida, se observan variaciones en el comportamiento y las emociones. Como ya se mencionó, entre los efectos más notables se encuentran los síntomas de desapego emocional y falta de empatía. De igual forma, se experimentan mayores niveles de estrés y ansiedad, debido a que uno de los efectos de la oxitocina es ayudar a regular dichas emociones.

Con respecto a las relaciones sociales, también se ven afectadas. De hecho, la capacidad de formar vínculos afectivos suele verse impactada de forma negativa y se perciben disminuciones en los comportamientos prosociales, es decir, en acciones voluntarias realizadas con la intención de beneficiar a otros.

Oxitocina en aerosol: Spray nasal

Es administrada en diversos contextos clínicos y de investigación dados sus efectos sobre el comportamiento humano. No obstante, es importante recordar que el uso de la oxitocina exógena debe darse bajo la supervisión de profesionales de la salud y basado en evidencia científica sólida para garantizar su seguridad y eficacia.

oxitocina en aerosol. efectos de la oxitocina

La oxitocina en aerosol es una forma sintética de dicha hormona que se administra por vía intranasal. El por qué de su vía de administración se debe a que la mucosa nasal es altamente vascularizada, permitiendo una rápida absorción de la oxitocina directamente al torrente sanguíneo. De esta manera, la vía intranasal facilita que llegue a nuestro cerebro de forma más efectiva en comparación a otras vías de administración. A su vez, es una vía no invasiva, y que ha demostrado tener impacto significativo en la cognición social. 

Efectos de la oxitocina en la cognición humana

En primer lugar, mejora la detección y evaluación de afecto de las señales sociales, especialmente en la detección de emociones positivas. Específicamente, aumenta la sensibilidad y precisión en la identificación de las emociones en expresiones faciales y palabras con valencia positiva. 

Paralelamente, la oxitocina mantiene efectos terapéuticos en condiciones como la depresión anhedónica o el abuso de sustancias al modular circuitos cerebrales relacionados con el procesamiento de emociones positivas y recompensa. Adicionalmente, se investigó como la administración de oxitocina impacta en, por ejemplo, el trastorno de estrés post traumático (TEPT), la esquizofrenia, el autismo, entre otros (Guastella et al., 2012).

Una discusión ética sobre la oxitocina

Debido a los efectos de la administración de oxitocina en aerosol en el comportamiento humano y la interacción social, surgen cuestionamientos acerca de la práctica moral. Entendiendo que la oxitocina exógena incrementa la tendencia hacia las conductas sociables, autores se cuestionan qué sucedería si esto se aplicara en espacios de decisión cruciales para el destino de la humanidad. Pues podrían incrementarse las oportunidades para alcanzar el mejor resultado cooperativo posible. Un ejemplo de ello sería cuando una comunidad fuese a tomar una decisión compleja donde hubiera un contexto de polarización, sobre un tema que generara tensiones y conflictos.

oxitocina en aerosol. efectos de la oxitocina

Si bien se posiciona como una propuesta interesante donde la ética y la neurociencia se entrelazan, existen algunas advertencias y discusiones pertinentes. En primer lugar, aún no son claros los resultados que la administración de oxitocina en aerosol tiene en nuestra moral. Asimismo, dicha correlación pareciera ser dependiente de un conjunto de factores que, de estar ausentes, revertirían totalmente los efectos, produciendo efectos antisociales.

¿Qué nos aporta el cuestionamiento?

Esta propuesta pone un claro ejemplo de aquellas situaciones donde la ética y la neurociencia deben conformar una red de diálogo, evaluando el costo y beneficio de los tratamientos administrados en humanos. Su uso terapéutico sería más justificado en situaciones donde el riesgo de deterioro en un individuo sin tratamiento es alto, y existe evidencia suficiente de que el tratamiento pudiera incrementar su bienestar. De manera similar, esto aplica cuando una decisión colectiva tiene un alto potencial de causar daño social, y hay evidencia razonable de que la administración de oxitocina puede mejorar la calidad de la decisión cooperativa (García Valverde et al., 2022).

Conclusión

En síntesis, la oxitocina desempeña un papel crucial en nuestras interacciones sociales y emocionales, siendo vital para la empatía, la cooperación y comportamiento moral. Su administración en aerosol intranasal aprovecha la alta vascularización nasal para una rápida absorción, impactando significativamente en la cognición social y emocional humana.

Ahora aunque prometedora, la aplicación de la oxitocina plantea interrogantes sobre cómo podría influir en nuestra moral. Esta reflexión subraya la necesidad de un diálogo continuo entre la neurociencia y la ética con el objetivo de asegurar un buen uso. Por último, nos preguntamos: ¿Qué impacto podría tener la investigación futura en este campo? ¿En qué casos estás de acuerdo en que se administre esta hormona por vía exógena?

Referencias bibliográficas

  • García Valverde, F. y Fatauros, C. (2022). En defensa de un diálogo entre las neurociencias y las éticas normativas: ¿Mejoramiento moral mediante oxitocina en aerosol? Revista de humanidades de Valparaíso, (20), 57-75. Doi: 10.22370/rhv2022iss20pp57-75
  • Graustella, A. J. y MacLeod, C. (2012). A critical review of the influence of oxytocin nasal spray on social cognition in humans: Evidence and future directions. Hormones and Behavior, 61(3), 410-418. Doi: 10.1016/j.yhbeh.2012.01.002.
  • Morocho-Parra, G. D. L. Á. y Valencia-Zamora, F. J. (2024). Mecanismo fisiológico de la oxitocina en el comportamiento humano y las emociones. MQRInvestigar8(2), 1118-1132. Doi: 10.56048/MQR20225.8.2.2024.1118-1132