Días atrás, falleció el cantante estadounidense Aaron Carter, hermano del ex BackStreet Boys, Nick Carter. Fue encontrado sin vida en su casa de Lancaster, California.

Según había confirmado él mismo, padecía de esquizofrenia, trastorno bipolar, depresión maníaca, ansiedad y adicción al alcohol. Este lamentable caso, pone en evidencia la relación y retroalimentación que existe entre trastornos mentales y adicciones. ¿Cuáles son las consecuencias para el cerebro?

A veces queremos culpar a alguien o algo por una pérdida. Pero la verdad es que la adicción y la enfermedad mental son los verdaderos villanos aquí.

Nick Carter

Trastornos psiquiátricos y adicciones

¿Dos caras de una misma moneda?

El País (2022). Aaron y Nick Carter en los premios MTV de 2006, celebrados en Los Ángeles (EE. UU.) [Fotografía]. Recuperado de www.elpais.com

Existe una estrecha relación entre el consumo de sustancias psicoactivas y enfermedades mentales.

Los estudios actuales sobre las relaciones causales entre los trastornos psiquiátricos y los inducidos por sustancias no son concluyentes.

Sin embargo, se sabe que los síntomas de los trastornos mentales y de los problemas de adicción interactúan y se condicionan mutuamente

La persona que abuse del alcohol o de otro tipo de sustancias adictivas, puede padecer, a corto o largo plazo, algún tipo de trastorno psiquiátrico. Estos cambios, se pueden percibir de forma inmediata, o bien a lo largo del tiempo a través de trastornos depresivos, experiencias alucinatorias o desconfianza patológica, por nombrar algunos.

En este contexto, el consumo de drogas puede derivar en diversos trastornos mentales, o bien a la inversa. El hecho de que, en una búsqueda por sentirse mejor, algunas personas con afecciones psiquiátricas adquieran ciertas sustancias, se conoce como comorbilidad.

Aaron Carter tenía esquizofrenia y bipolaridad

La esquizofrenia es un trastorno que afecta a cómo la persona piensa, siente y actúa. Según destaca el médico psiquiatra Jorge Guareschi:

Se presenta en estructuras psicóticas de personalidad, se caracteriza por delirios y comienza a una edad temprana, entre 18 y 28 años. Las personas que se ven afectadas por esta enfermedad, tienen dificultades para distinguir entre lo que es real y lo que es imaginario. También se evidencian dificultades expresando emociones normales en situaciones sociales.

El caso Aaron Carter: ¿Cuál es la relación entre trastornos mentales y adicciones?
Waring, O. (2019). Aaron Carter [Fotografía de Getty-Contributor]. Recuperado de www.thesun.ie

Las personas con esquizofrenia tienen un desequilibrio de los químicos del cerebro como la serotonina y la dopamina.

Estos neurotransmisores permiten que las células de los nervios en el cerebro envíen mensajes. Así, el desequilibrio de dichos químicos afectan la forma en que se reacciona a los estímulos. 

En cuanto a la bipolaridad, es un estado de alteración en el ánimo donde la persona excede el rango normativo. Se evidencian momentos de excitación y manías extremos.

Además, es común que se recurra al consumo de sustancias para intentar salir de tal estado y se genere, así, una adicción que contribuye al deterioro de la salud.

El consumo de drogas afecta y profundiza trastornos como la esquizofrenia y bipolaridad.

Alcoholismo: El peor enemigo

El alcoholismo trae aparejado varias patologías mentales. Los expertos aseguran que es una peligrosa puerta de entrada al consumo de otros psicoactivos. Además, se trata de la sustancia que más comorbilidad provoca y tiene graves efectos sobre el sistema nervioso.

Según Guareschi, el consumo prolongado de alcohol, produce efectos agudos en órganos blandos. Incide además en la predisposición a otras enfermedades como el cáncer. A largo plazo, en el cerebro, provoca una una encefalopatía asociada al déficit de vitamina B1, que cumple una función esencial en el metabolismo.

TN. (2022). Aaron Carter murió a los 34 años [Fotografía]. Recuperado de www./tn.com.ar

Dos afecciones graves

El consumo de alcohol produce una lesión a esta vitamina que predispone a desarrollar el síndrome de Korsakoff, caracterizado por el daño permanente a zonas del cerebro involucradas con la memoria.

Otro de los deterioros se asocia a la demencia alcohólica. Este trastorno daña las estructuras del sistema nervioso central y periférico. Así, se ve afectado el funcionamiento neuronal, por lo que se evidencian cambios en el estado de ánimo, ansiedad, depresión, mayor irritabilidad, pérdidas de memoria, alteraciones conductuales, emocionales y cognitivos.

En los adolescentes, el consumo excesivo de alcohol limita el desarrollo cerebral y produce un déficit trascendental en la recuperación de la información verbal y no verbal. También se ve afectado su desempeño conductual. Todos estos problemas se van profundizando a medida que se mantiene el consumo de alcohol a lo largo del tiempo.

Existen numerosas razones para limitar el consumo de alcohol; tenerlas en cuenta nos llevará a un estilo de vida más saludable donde la salud mental se verá beneficiada.