En el mundo del deporte la motivación es una de las variables que suele marcar diferencias en el desempeño de los deportistas. Pues, probablemente, un deportista desmotivado no tenga su mejor desempeño frente a uno que sí se encuentre motivado por la práctica de su deporte. Estos escenarios pueden afectar el rendimiento de otros compañeros, si de deportes colectivos se habla. Veamos más sobre la relación entre el ejercicio y la motivación.
¿Qué es la motivación?
Etimológicamente se compone por el latín Motivus que significa movimiento y por el sufijo –ción, que significa acción y efecto. Al respecto, la Real Academia Española (RAE) la describe como un conjunto de factores internos o externos que condicionan las acciones de las personas. En este sentido, podría aclararse que la motivación no es observable, sino que lo que se visualiza es el comportamiento de un sujeto motivado y cómo éste afecta en la presencia o no de la motivación.
También, podría definirse como un aspecto psicológico vinculado al desarrollo del ser humano. Implica, por ello, un estado que puede verse modificado en distintos períodos y situaciones, de ahí que su presencia es cambiante y adquiere cierto dinamismo. A la vez, se puede autorregular internamente y externamente bajo distintos factores condicionantes, tanto para fortalecerla como disminuirla (Pereyra, 2020).
Tres escenarios posibles
- Amotivación: Deportistas que no poseen motivación por su deporte.
- Desmotivación: Jugadores que tuvieron motivación pero esta disminuyó vinculada a la práctica.
- Motivación: Practicantes que se encuentran motivados por la realización de la actividad.
Motivación y logro de objetivos
Desde una perspectiva de la psicología del deporte, el establecimiento de metas y objetivos se presenta como una técnica esencial para trabajar con deportistas de forma colectiva y/o individual. Esto es especialmente cierto cuando se quieren combinar, por ejemplo, el deporte y el rendimiento académico. Así, pueden mencionarse distintas variables que condicionan este proceso, tales como, la especificidad, proximidad, efectividad, dificultad y obtención de resultados.
¿Cómo hacerlo?
En este sentido, para la obtención de un desempeño óptimo los deportistas deben desarrollar habilidades como el reconocimiento de los objetivos, identificación de objetivos incorrectos para transformarlos en correctos, con un ajuste acorde al estado personal y contexto deportivo. Y es que, las competencias que pueden destacarse son el control de esos objetivos, a través de una fijación que sea realista, específica, evaluable y con disposición a la tarea.
Un entrenamiento psicológico eficaz debe considerar además la comunicación, las relaciones con otros y la cohesión grupal para promover un logro de objetivos a nivel colectivo. Sin embargo, los deportistas que participan de deportes colectivos también deben establecer objetivos individuales. Asimismo, esta técnica posibilita un desarrollo de la motivación ligada al esfuerzo, potenciando la autoconfianza, atención y concentración.
En conclusión, su utilidad radica en una mejora de la autonomía favoreciendo el desarrollo personal, el compromiso y el rendimiento de los deportistas. Al tiempo que adquieren valores y tienen una mayor comprensión de las situaciones de su deporte (González-Campos et al., 2018).
Algunos tipos
Mientras que la motivación intrínseca se encuentra vinculada con el disfrute por la realización del deporte, la motivación extrínseca en el ejercicio plantea la presencia de cierta influencia externa para realizar dicha actividad. Entonces, la motivación interna, se vincula con el crecimiento y autoconocimiento personal; y en contrapartida, la motivación externa se orienta a la obtención de recompensas (Pereyra, 2020).
En este sentido, distintos estudios han comprobado que los practicantes de deportes individuales como, por ejemplo, la escalada, tienen una motivación intrínseca más elevada que extrínseca. De manera contraria, en los deportes colectivos como el baloncesto, adquiere mayor preponderancia la motivación extrínseca en el ejercicio, de ahí la utilidad de tener una mayor certeza de la dirección de esa motivación para seleccionar los reforzadores más adecuados que la potencien.
¿Algo que ver con el estilo de vida?
Por otra parte, la motivación intrínseca se vincula con un estilo de vida saludable mediante la práctica deportiva. Sin embargo, la motivación extrínseca se encuentra condicionada por la competitividad en el ejercicio, es decir, por el deseo de ganar al rival. Condiciona, además, la situación deportiva de los practicantes, es decir, si están federados o no.
Estudios vinculados con la motivación intrínseca plantean que la percepción de éxito individual y colectivo, sumada al sentimiento de pertenencia e identidad social de sus equipos, sirven para potenciarla. Mientras, a la inversa, se estimula el abandono del deporte practicado (Aznar-Ballesta y Vernetta Santana, 2023).
Una mirada desde la psicología del deporte
La psicología del deporte como disciplina científica plantea que los factores psicológicos afectan el desempeño deportivo, al tiempo que la participación en distintos deportes puede tener incidencias en el desarrollo y la salud de los practicantes. Al respecto, muchos atletas y entrenadores sostienen que entre el 40% y el 90% del éxito en el contexto deportivo es producto de factores mentales.
Por ello, el estado en que se encuentra la mente de los deportistas afecta a todos los procesos cognitivos y afectivos. En este sentido, el trabajo con un psicólogo del deporte, como profesional de la salud capacitado para ello, es importante para entrenar la mente en excelentes condiciones y con ciertas garantías para los deportistas (Reyes Bossio et al., 2012).
Conclusión
La motivación resulta ser un constructo psicológico con gran utilidad para la modificación de conductas, logro de objetivos y producción de bueno hábitos. Entonces, trabajar en el diseño y establecimiento de programas específicos para potenciar la motivación en el deporte resulta crucial, cualquiera sea la disciplina elegida. Es así como, recurrir a un psicólogo del deporte para entrenar la mente de los deportistas será lo que realmente marque la diferencia en la obtención de mejores resultados.
Para aquellos interesados en explorar más a fondo esta área y desarrollar habilidades clave para mejorar el rendimiento y la motivación de los deportistas, el curso sobre psicología deportiva puede ofrecer una formación integral y especializada.
Referencias bibliográficas
- Aznar-Ballesta, A. y Vernetta Santana, M. (2023). Disfrute y motivación en la práctica de actividad física y satisfacción con los servicios deportivos durante la adolescencia. (Enjoyment and motivation in the practice of physical activity and satisfaction with sports services during adolescence). Retos, 47, 51-60. https://doi.org/10.47197/retos.v47.94986
- González-Campos, G., Rodríguez-López, M. y Castañeda-Vázquez, C. (2018). Evaluación de un programa motivacional de establecimiento de objetivos para la optimización del rendimiento en deportistas de alto nivel: una aproximación cualitativa. Cuadernos de Psicología del Deporte, 18(3), 12-25. https://revistas.um.es/cpd/article/view/31653
- Pereyra, E. (2020). Influencia de la motivación en la actividad física, el deporte y la salud. Revista Científica Arbitrada de la Fundación MenteClara, 5, 1-19. https://doi.org/10.32351/rca.v5.200
- Reyes Bossio, M., Raimundi, M. J. y Gómez Correa, L. (2012). Programa de Entrenamiento en Habilidades Psicológicas en jugadoras de voleibol de alto rendimiento. Cuadernos de Psicología del Deporte, 12(1), 9-16. https://revistas.um.es/cpd/article/view/162581